Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !


Con la Angélica apareció también la poesía épica titulada Dragontea, nombre derivado del célebre Francisco Drake, calificado por el ódio nacional español de dragón é instrumento del demonio, y objeto de sátiras y mofa. Continuación y fin de la vida de Lope de Vega.

Sa-Tó, me dice sus nombres: forman parte de la guardia selecta, que en las ceremonias da escolta al quitasol de seda amarilla con un dragón bordado que es el emblema sagrado del Emperador. Todos ellos cumplimentan profundamente a un viejo de barbas venerables, con sobrevesta amarilla, privilegio de los ancianos.

Le llevaron de Liverpool a Amsterdam, y Zaldumbide lo rescató, pagando sus deudas y embarcándole en El Dragón. Allen era un buen muchacho, pero muy poco marino. Por más que yo intenté explicarle las maniobras, no pude. Miraba al mar como algo sin interés. Tenía espíritu de labrador. Otro hombre bueno en el fondo era Franz Nissen, el timonel. Hablaba muy poco, y nunca de su vida.

Aquel es un país libre, de poblacion inteligente, activa y honrada, que me habia impresionado muy agradablemente. El Mediterráneo estaba tranquilo como un lago, y su silencio absoluto no era interrumpido sino por el estridor de la maquinaria del vapor, y los resoplidos que de tiempo en tiempo lanzaba ese dragon de hierro y de vientre inflamado que se llama locomotiva.

Echose a reír el bárbaro, diciendo que él no tenía miedo a los cóleras ni a muertes de ninguna clase. Después hablaron de lo que motivó la visita de Gracián. Tengo aviso de Cataluña de la remisión de un encargo que me interesa mucho dijo este sacando una carta . Me dicen que recoja el bulto.... porque es un costal como de media fanega, Sr. López... en la posada del Dragón.

Las aplicaciones de la maquinaria que hubo de exigir su representación, debieron ser de las más complicadas, porque casi todas las hazañas atribuídas á Hércules aparecen en este drama. Entre otras, trepa á la cima del Parnaso, monta allí en el caballo Pegaso y cabalga en él por los aires, para pelear con el dragón, que guarda las manzanas de las Hespérides.

El más inocente de aquéllos tenía unas cuantas muertes, sobre la conciencia. En el rancho del sollado reñían a todas horas unos contra otros. Muchas veces había algún muerto. Lo echábamos al mar y seguíamos adelante. Dirigía a los holandeses Ryp, el cocinero de El Dragón, un hombre que tenía todo el cuerpo tatuado con la figura de los barcos en donde había servido.

»Pero los hijos del Yemen han sombreado con el velo del Islam la parte mejor de la tierra, desde el Thibet hasta el Pirineo, y á impulso de la cimitarra de los fieles espiran el dragon imperial en los páramos de Sem , la escuela de Cristo en los verjeles de Japhet.

Cuando se eclipsa la luna arman los tagalos gran ruido, con el que dicen la defienden de la lucha que tiene con el dragón. Creen en amuletos para que no les toquen las balas, y para librarse de otros peligros.

Casarme con cualquier hombre honrado... Juan Bou me ofreció su mano, y aunque me gusta poco, es un hombre de mérito... ¿Casarte...? con el monstruo, con el dragón...».