United States or Gibraltar ? Vote for the TOP Country of the Week !


AZUCENA. Es verdad, no lo sabes, y sin embargo era mi madre, mi pobre madre, que nunca había hecho daño a nadie. ¡Pero dieron en decir que era bruja!... MANRIQUE. ¿Vuestra madre? AZUCENA. ; la acusaron de haber hecho mal de ojo al hijo de un caballero, de un Conde. No hubo compasión para ella, y la condenaron a ser quemada viva. MANRIQUE. ¡Qué horror!... Bárbaros... ¿Y lo consumaron?

En realidad, si algún dios o mortal pudiese escuchar aquellos bárbaros sonidos, retrocedería horrorizado. Sobre todos flotaba sin cesar uno por demás extraño algo así como all, call, mall. Un filólogo perspicaz, después de estudiar bien aquel sonido, teniendo en cuenta la persistencia de la vocal a y de la consonante ll, acaso deduciría que la palabra expresada por el alcalde era canalla.

Tiene toda la sangre en la cabeza, suda como cavador, cierra las manos, hace gestos de desesperación cuando se pierde un actor. Si lo dije, si no sabe el papel. ¿Silban? ¿Qué murmullo es ese? Bien, bien; este aplauso ha venido muy bien ahí: esto va bien; ese trozo tenía que hacer efecto por fuerza. ¡Bárbaros! ¿Por qué silban?

Por fin, á los últimos de Diciembre, llegó más muerto que vivo por los muchos trabajos, fatigas y molestias que sufrió, á las tierras tan deseadas de los Piñocas. Pero en medio de tanta calamidad fué de grande consuelo y alegría á aquellos bárbaros ver en sus países un ministro de nuestra santa fe.

Y para prueba más manifiesta del milagro se llegaron las llamas á una casa y formaron sobre ella un arco, pero sin lesión alguna. Con esto se confirmaron los cristianos en la fe y en la devoción á la Madre de Dios, y los bárbaros, vencidos más del prodigio que de su promesa, se alistaron en el número de los fieles.

El Nacional insistía en sus creencias. El toreo era arte de otros tiempos, oficio de bárbaros, pero también tenía sus hombres dignos de iguales consideraciones que los demás. ¿Y de dónde sacas eso de reaccionario? dijo el doctor . eres una buena persona, Nacional, con los mejores deseos del mundo, pero también eres un ignorante. Eso exclamó don José , eso es la verdad.

Pero si la veneración á las generaciones pasadas no es más que un vano sentimiento, ¡con cuánto más respeto todavía debiéramos recorrer estas cavernas, donde se refugiaban nuestros primeros abuelos, los bárbaros iniciadores de toda civilización!

Buenos Aires es tan poderosa en elementos de civilización europea, que concluirá al fin con educar a Rosas y contener sus instintos sanguinarios y bárbaros.

Cuando esta memoria fué escrita, el Salado marcaba el limbo exterior de la provincia de Buenos Aires, sin que le sirviese de barrera contra los bárbaros, que penetraban hasta los arrabales de la ciudad; y por consiguiente otra causa de este atraso era la inseguridad de la campaña, que el Gobierno no se ocupaba de amparar, por mas que se formasen planos de defensa. Los indios aprovechaban esta indolencia, y talaban los campos para suplir

Así no debe extrañar que actores como Zacconi, como Novelli, como Coquelin, esos reyes del gesto que han bordado las perfecciones supremas de su arte, tengan un repertorio pequeño; los Balzac no abundan; la intensidad, grata á los atenienses, generalmente se logra á expensas de la cantidad, que admiran los bárbaros.