United States or Egypt ? Vote for the TOP Country of the Week !


Si eso no vale nada.... ¿qué importa un catarro?... Animarse.... Este año tendrá comedias la Puenteancha... la Monteros me lo dijo.... Los Torreplana de Arganzón indicaron ya que recibirían los jueves.... Tendremos en el Real a la Patti y a Gayarre; ¡figúrate! Hemos escrito que nos abone, por si no llegamos a tiempo....

8 El entonces respondiendo, le dijo: Señor, déjala aún este año, hasta que la excave, y la abone. 10 Y enseñaba en una sinagoga en sábado. 12 Cuando Jesús la vio, la llamó, y le dijo: Mujer, libre eres de tu enfermedad. 13 Y puso las manos sobre ella; y luego se enderezó, y glorificaba a Dios.

Necesita dinero para la primera expedición a Tucumán, y pide al tesorero de la Casa de la Moneda 8.000 pesos por cuenta de sus acciones, que no había pagado; en Tucumán pide 25.000 pesos para pagar a sus soldados, que nada reciben, y más tarde pasa la cuenta de 18.000 pesos a Dorrego para que le abone los costos de la expedición que había hecho por orden del gobernador de Buenos Aires.

Todas las noches, como inconscientemente, sin que en ello interviniese su voluntad, se encaminaba a la Opera. Y para verle más a menudo, fue por lo que me aboné a esta localidad. Ultimamente ya no venía sino de tarde en tarde. Pero la semana pasada estuvo un día. Encontrábase sentado al otro lado de la orquesta.

Novedad me ha parecido; Vueseñoría perdone. No hay novedad que no abone 555 El deseo que he tenido De serviros, si yo fuese, Para que no os cause enojos, Tan dichoso en vuestros ojos, Que serviros mereciese. 560 DO

A esa carta contestó Martí con otra que es como un blando arroyo de aguas puras que llevara en su corriente la hoja de una espada. Refiriéndose a los ataques personales que se le hicieron escribió: «Y ahora señor Collazo, ¿qué le diré de mi persona? Si mi vida me defiende nada puedo alegar que me ampare más que ella. Y si mi vida me acusa, nada podré decir que la abone. Defiéndame mi vida.

¡Que no me empuje!... Yo no soy criminala... Yo tengo familia, conozco quién me abone... Ea, que no voy a donde usted quiere llevarme...». Se arrimó a la pared; pero el fiero polizonte la despegó del arrimo con un empujón violentísimo.