Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 6 de mayo de 2025


Entónces, á mi afan suelto la llave y escribo, sin pensar adquirir gloria ni de fama ó de títulos ansioso, que esa ambicion en fuera irrisoria. Escribo, como llora el desgraciado, como canta el alegre; porque el pecho es para el hondo sentimiento estrecho y se desborda el duelo ó la alegría, ésta con expansiva carcajada, aquél en una lágrima sombría.

Pero más comúnmente vivieron los señores montañeses retirados en sus casonas y mayorazgos, prefiriendo ser los primeros de su aldea, a cualquier puesto de la corte, aunque sus segundones se hicieran por su cabeza o por sus puños, obispos y generales, o trajeran de América con qué adquirir títulos y mujeres, de quienes, a la vuelta de pocas generaciones, se pudiera decir lo que de los dineros del sacristán.

La Regenta no pensaba en los títulos de propiedad del Vivero; gozaba de la naturaleza, de la salud y del relativo lujo que habían acumulado los Vegallana en su famosa quinta, sin fijarse en nada más que gozar. Vivía allí como en un baño, en cuya eficacia creía.

Por la mañana le había entregado Tristán los títulos con el objeto de negociarlos en la Bolsa por la tarde, y quedaron en verse aquella misma noche en el café a primera hora para que le diese cuenta de la operación. Tristán acudió puntual, pero Samper no pareció por allí. Aguardole media hora, una hora, hora y media. Nada.

La voz de Salvatierra resonó en el silencio de la gañanía como un grito de combate. El mundo empieza a despertar de su sueño de miles de años; protesta de haber sido robado en su infancia. La tierra es vuestra: nadie la ha creado y pertenece a todos. Si en ella existe algún mejoramiento, obra es de vuestras negras manos, que son vuestros títulos de propiedad.

¿Qué ha oído, querido amigo? ¿qué es eso? Los títulos que me ha acordado usted: maricón, y Dios sabe qué más. Y él, sin alterarse en lo más mínimo: Siempre lo he dicho, todos los días se lo estoy diciendo a mi mujer: las puertas no sirven para nada. Pero no hay que tomarlo a mal, mi viejo amigo. ¿Comprende?... siempre me ha fastidiado que usted se hubiera puesto de parte de Pütz.

Y la pobre continuó Berta sigue adorando al hombre que la ha hecho rica, y cuando intenta realizar su resma de títulos, se entera de que únicamente pueden servirle para empapelar su dormitorio.

Diciendo estas palabras y echando a correr Rafael, volvió muy pronto con un libro en folio y en pergamino, que sacó de la librería del conde. He aquí dijo la creación, privilegios y antigüedad de los títulos de Castilla, por don José Berni y Catalá, abogado de los Reales Consejos. Página 140. «Conde de Alba, hoy día duque.

Sin embargo, ese cálculo no es seguro, porque ni se sabe con seguridad la época, en que comenzó á escribir, ni tampoco la extensión, que ha de atribuirse á cada pliego. La reimpresión en cinco tomos de las obras sueltas añade ciento veinte títulos, sacados probablemente de una edición posterior.

La devota doña Elvira se enorgullecía de los títulos nobiliarios del hermano, pero despreciaba al hombre por sus calaveradas, que daban triste celebridad al noble apellido de Torreroel. El señor Fermín, influido por sus antiguos respetos a las jerarquías históricas, admiraba a aquel noble y alegre vividor.

Palabra del Dia

tundas

Otros Mirando