Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 18 de noviembre de 2025
Algunas veces te oí decir que nosotros, los pobres cómicos, os habíamos pegado a ti y a los tuyos nuestras costumbres alegres, despreocupadas. Todo se pega. También a mí me habéis pegado vosotros, tú, tú, Bonis, sobre todo, vuestras preocupaciones y vuestro temor de la vida incierta, peregrina. Esto de que le lleve a uno el viento de un lado a otro, es terrible. Voy a verte.
Las preocupaciones y peligros de estas empresas no se traslucían nunca en su rostro jovial y sus ademanes generosos. Sólo se mostraba triste cuando pasaban varias semanas sin que él recibiese noticias de alguna barca salida de Argel en pleno mal tiempo.
Pero ahora, en el buque, llevando una existencia de inercia, sin preocupaciones, sin amistades, con largos encierros en el camarote para evitarse el trato de las gentes, la imagen del esposo resurgía en ella con una irresistible novedad, acompañada de estremecimientos largo tiempo olvidados.
A pesar de todo lo expuesto, es digna esta disputa de llamar nuestra atención, porque, entre otras razones, nos ofrece la prueba de que todas las preocupaciones estrechas y máximas pedantescas, que enseñaron Boileau y su escuela con tantas pretensiones, y que dieron después la vuelta á toda Europa, fueron conocidas en España medio siglo antes y quizás expuestas con más ingenio que en ningún otro pueblo.
Si nos hacemos ahora cargo de una de las condiciones más esenciales del arte dramático, que es la pintura de caracteres, confesaremos también en esta parte la rara maestría de Lope. Sabemos cuán arriesgadas son las preocupaciones, con que hay que luchar, para salir airoso en este punto.
El objeto de sus preocupaciones era un joven, casi de su edad, el ingeniero Taboada, que se había educado en los Estados Unidos y tenía la pretensión de exigir que se implantase de golpe en Méjico todo el sistema democrático, con su respeto á la ley y á las opiniones ajenas, que había conocido en la vecina República.
Su amor romántico por el mar y sus aventuras fué acompañado ahora de preocupaciones sobre el precio y el consumo del carbón, sobre la concurrencia rabiosa que hacía bajar los fletes, y la busca de puertos nuevos con carga pronta y remuneradora.
Pobre hijita; venme a ver, y conversaremos de tus preocupaciones.» Yo le respondí: «Señor Cura: La imaginación es una tonta, la vida un estropajo, y la sociedad un harapo que brilla mucho desde lejos, pero que bien mirado, no sirve para nada, a no ser para colocarla en un árbol a guisa de espantapájaros.
Desde los principios reinó en las principales cabezas un espíritu de emulacion, de inconstancia, y ningun sufrimiento á los trabajos: de cuyas preocupaciones no estaban exentas las personas mas caracterizadas, y todas juntas dirigian sus ideas á conmover los ánimos de la demas gente, para que se abandonase el puesto, cuyos intentos siempre fueron rebatidos por la constancia del Super-intendente.
No, Esteban; el amor a los hijos y la conmiseración para sus faltas deben estar por encima de todas las preocupaciones. Esa vida eterna del alma, promesa mentida de todas las religiones, sólo es una verdad por los hijos.
Palabra del Dia
Otros Mirando