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Actualizado: 31 de mayo de 2025


A vista de esto, parecia como preciso el abandonar el establecimiento de la Bahía de San Julian, dejando en él una columna ó pilastra que contuviese las reales armas, y una inscripcion que acreditase la pertenencia de aquel terreno, el cual fuese reconocido todos los años, al mismo tiempo que lo es Puerto Egmond en las Islas Falkland, pudiendo entonces egecutarse tambien al Deseado.

Estos rayos de luz fría y difusa hacían aún más densas las tinieblas. En su marcha, sacaban de la obscuridad aquí una capilla, más allá una lápida sepulcral o el relieve de una pilastra. El gran Cristo que corona la reja del altar mayor fulguraba sobre el fondo de sombra con el brillo del oro viejo, como una aparición milagrosa que flotase en el espacio entre un nimbo de luz.

Durante algunos minutos, apoyado en la pilastra, Muñoz aguardó todavía, con la esperanza pueril de que Adriana por un milagro apareciera. Porque se había acostumbrado a esa secreta hora de voluptuosa alucinación, como se habitúa el fumador de opio a la caricia fantástica que se le desliza en los sentidos con el veneno de la droga. Al fin se decidió a marcharse.

Gabriel se había sentado en el zócalo de una pilastra, entre dos columnas, pero a los pocos instantes tuvo que ponerse de pie. La humedad de la piedra, el frío de tumba que circulaba por toda la catedral, le penetraba hasta los huesos. Anduvo por las naves, llamando la atención de las devotas, que interrumpían sus rezos al verle.

Cuando un domingo, por primera vez, Adriana no acudió, un sufrimiento casi físico le traspasó. Durante toda la misa, que le pareció prolongarse extraordinariamente, lo pasó arrodillado, junto a la pilastra donde se ponía siempre, bajo el púlpito. El tintineo de la campanilla le hizo daño.

En el primero, donde estaba él, mezclábase a la blancura uniforme de la decoración el verde charolado de las palmeras de invernáculo, el verde pictórico de los enrejados de madera tendidos de pilastra a pilastra y el verde amarillento y velludo de unas parras artificiales, cuyas hojas parecían retazos de terciopelo.

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