Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 20 de junio de 2025


Y la majada muere en la llanura, Víctima de su union y su ternura! ¡Ay! no se en el herial humeante Sino el rebaño unido y espirante, Y un pastor que entre ruinas se lamenta Cuando los muertos de su campo cuenta! Así arrastra su cruz en este mundo El promotor de todo bien fecundo: Que no alcanzamos nunca un adelanto Que no reguemos con amargo llanto.

Oigo en usted la vibración de algo muy parecido a emociones muy conocidas, bien definidas, únicas y sin semejanza con otras para quien las experimenta; pero es ello cosa que no tiene nombre en sus cartas de usted y me obliga a compadecerle más que tan vagamente como usted se lamenta. Y no es eso lo que me gustaría hacer.

El alemán al servicio del zarismo no siente escrúpulos ni lamenta su conducta: mata fríamente, con método minucioso y exacto, como todo lo que ejecuta. El ruso es bárbaro, pega y se arrepiente; el alemán civilizado fusila sin vacilación. Nuestro zar, en un ensueño humanitario de eslavo, acarició la utopía generosa de la paz universal, organizando las conferencias de La Haya.

Este caballero, ó por mejor decir, este gentleman, que lamenta de todo corazón el haber nacido en Cuba, desempeña en la Nigricia criolla, esto es, en Guantánamo, las funciones de cónsul de S. M. Británica, y se siente más sajón que el rey Haroldo.

Se diría que Sidarta es la encarnación, el avatar de Amor, que llora y lamenta haber creado la vida; que padece en cuanto todo ser que tiene vida padece, y que anhela retrotraer la vida a la nada para que el padecimiento acabe. GOPA. Efímera es la vida: el padecimiento que de ella nace debe de serlo también. PRATYAPATI. No, Gopa; la vida no tiene término. La muerte es cambio, no fin.

Sin embargo, el mismo público que gime y se lamenta durante el invierno, es el que baila en el verano. ¡Inescrutables misterios de la humanidad, que yo respeto y admiro! Por eso los tales bailes son la única curiosidad que podemos ofrecer ya en Santander á los forasteros que nos visitan durante el estío; el único aliciente, el mejor cebo.

Ahora que podía llamarlos a todos de verdad «mis queridos amigos». Sonreían algunas señoras, con el dulce reproche femenil que lamenta y celebra a un mismo tiempo las temeridades del valor, y le amenazaban cariñosamente moviendo una mano con el índice en alto. «¡Ah, calaverón!... ¡Mala persona

Si , si tus soldados, si los hombres, Si las aves, los peces, si las fieras, Si todo sabe amor, si todo teme Perder su bien, y con sus celos propios Defiende casa, nido, mar y cueva, Llora, lamenta, gime y brama; advierte Que celos y sospechas me obligaron Al desatino que a tus pies me rinde.

Comienza, pues, la nueva vida con locuras y placeres de los sentidos; pero el hombre, que siente en su pecho más elevada vocación, se fastidia pronto y abandona el palacio. Asáltanle en su peregrinación el Tiempo, la Muerte y el Pecado; lo aprisionan y lo entregan á la Culpa, en cuyos lazos viven todos los hijos de la tierra. Cargado de cadenas, se lamenta el hombre en su prisión.

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando