Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 31 de mayo de 2025
Ya me extrañaba yo que hisiésemos er viaje sin sorpresas. ¡Pero camará, que no haya medio de librarse de esa gente!... Cambió algunas palabras en alemán con el primer oficial y luego gritó a unos camareros españoles que estaban al servicio de «los latinos»: A ve esos güenos mozos; ¡tráiganlos pa acá!
Habia juego fuerte, y Candido se pasmaba de que nunca le venian, buenos naypes; pero Martin no lo extrañaba.
Esa conversación mantenida en la penumbra, les iba acercando familiarmente y revestía de una mayor confianza y de una más completa intimidad su diálogo. La señora Liénard no parecía en lo más mínimo cohibida por la gravedad de su interlocutor y aun se extrañaba de encontrarse hablando tan llanamente con ese parisiense a quien desde tan pocas horas antes conocía.
Algunas veces se extrañaba de ver que su despecho se convertía en amor, sorprendiéndose de suspirar sin testigos y con la mejor buena fe del mundo. El recuerdo de tres años pasados con el conde producía en su corazón una sensación mezcla de dolor y de placer.
Un día conversaron acerca de Julio, y Adriana escuchó sin perder palabra. Carmen extrañaba de que nunca le hubieran conocido ellas ningún amor. No hay mujeres para Julio, murmuró Laura. Sería raro que no tuviera alguna pasión por ahí, añadió Zoraida.
El marino se extrañaba de que Aresti no hubiese visitado á su primo. No es que yo crea que va á morir dijo el capitán pero muchacho, anda muy malucho. No sé qué mala mosca le ha picado de algún tiempo á esta parte. No come, está tristón, pasa el día sentado, dejándose cuidar por su mujer y su hija como si fuese un niño. En fin, que no es ni sombra de lo que fué.
Tardó en contestarme; noté eso, que tardaba en hablar. En fin, encogiendo los hombros, me dijo: «Sí, efectivamente, para gastos preliminares, de preparación... pero tengo orden, ahora que me acuerdo, de pagar a usted inmediatamente ese dinero». Yo, la verdad, extrañaba que haciendo tan pocas horas que usted había recogido los cuartos... pero a mí, ¿quién me metía en averiguaciones?, ¿no es eso?
Así llegaban hasta la Mancha o Extremadura; y si los azares de la mala suerte les imponían el marchar a pie, buscaban refugio en las viviendas de los campesinos, gente crédula y risueña, que se extrañaba de sus pocos años, de su atrevimiento y su charla embustera, tomándolos por verdaderos lidiadores.
Don Silvestre no se extrañaba tanto de la desvergüenza del elegante jugador como del eco que en la concurrencia hallaban sus torpezas; parecíale insoportable la impudencia del uno, pero mucho más imperdonable la aquiescencia de los otros.
¡No puede ser! dijo Timoteo inundado de gozo. ¿Que no puede ser? chilló el cura abalanzándose a él y sujetándole por la solapa de la levita. ¿Cree usted que yo no soy capaz de pisarle la cara? No es eso. Lo que yo quería decir es que me extrañaba que un muchacho tan inocente, que parecía una palomita sin hiel...
Palabra del Dia
Otros Mirando