Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 16 de mayo de 2025


Toma, por distraerme un rato, por verte a ti, por ver a Estupiñá, figuras raras de la humanidad, excentricidades, tipos, como todo esto que yo llevo a Londres para los aficionados a lo característico y al color local. Guillermina daba suspiros. No quería incomodarse.

¡Ya lo creo!... No sólo porque en ella se goza de un espectáculo mil veces más hermoso que desde esta ventanilla, sino porque habría conversado con el maquinista, en grande. ¡Yo no me explico, che, Lorenzo, estos gustos de Melchor!... ¡estas excentricidades!... ¡Conversar con el maquinista!... Asómbrate cuanto quieras; pero confiesa que sin motivo fundado.

Hibbins, cuyas excentricidades, ó mejor dicho, locura, la llevaban á hacer lo que pocos de la población se hubieran atrevido á realizar, esto es: sostener una conversación, delante del público, con la portadora de la letra escarlata.

Mucho se alegró el ministro de verse al fin en este asilo, sin haberse vendido él mismo cometiendo una de esas extrañas y malignas excentricidades, á que había estado continuamente expuesto, mientras atravesaba las calles de la población.

Se dijo que el emperador tal vez la desterrase á sus vastas propiedades de Siberia para doblar su voluntad, y la nieta del cosaco contestó á la amenaza prometiendo á gritos su suicidio antes que obedecer. Al fin, el soberano dejó prudentemente que cumpliera su deseo. Casándose, tal vez renunciase á sus excentricidades, y la corte de Rusia, pródiga en escándalos, tendría uno menos.

Y al fin pudo adivinar el francés que su suegro, al hablar de seriedad, aludía á la entereza de carácter. Según declaración espontánea de Madariaga, desde los primeros días que trató á Desnoyers pudo adivinar un genio igual al suyo, tal vez más duro y firme, pero sin alaridos ni excentricidades.

Escuchando al maestro, y bajo la acción sedante de su ademán y de sus ojos tranquilos, recuerdo las incoherencias maravillosas de esos dos libros que emulan las páginas mejores de Maupassant, y que un nervioso no podría leer de noche y á solas. Hoffmann, dando forma y color á sus excentricidades, jamás supo escribir nada semejante.

Francia misma, desechando antiguas enemistades, busca con fina y constante solicitud la amistad de los rusos y los lisonjea y los encomia, poniendo de moda hasta las rarezas y excentricidades de sus escritores. Tal vez España sea la única nación que por el afán de no comprometerse ha esquivado toda amistad y se ha quedado sola.

Y toda esta fortuna enorme, que casi se doblaba por año con nuevos descubrimientos, pertenecía por entero á una mujer, la joven princesa, que se consideraba como de la familia imperial por obra de su ascendiente, y había preocupado más de una vez al soberano, á causa de las excentricidades de su carácter.

Vivía entregada en absoluto a la devoción, pero a una devoción caprichosa, fantástica, en nada parecida a la que practican las almas verdaderamente místicas. Toda su vida había dado señales de un humor excéntrico, mas desde la muerte del conde se había pronunciado tanto que bien podían tomarse sus excentricidades como manías, y no de las más leves.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando