United States or El Salvador ? Vote for the TOP Country of the Week !


Frecuentan este sitio personas que vienen á pagar con el oro del rey el frenesí oratorio que enloquece al pueblo. ¡Quién! ¡Quién! ¿Quién de nosotros continuó el orador no conoce al llamado Coletilla? Es un realista fanático, un malvado agente de la casa grande. ¿No le conocéis? Este hombre es una culebra que se desliza entre nosotros para corromper á los oradores jóvenes.

En ese caso, el inexorable juez que todo hombre lleva en mismo, se deja comprar y corromper. Miles de hombres que han cometido por lo menos una vez esa bajeza, no por ello dejan de seguir viviendo contentos, engordan con perfecta tranquilidad de espíritu, felices del cumplimiento de su deseo, que se apresuran a olvidar tan pronto como se ha realizado.

Tristán mirándole aún con mayor fijeza continuó: Su verdura no sólo tiene la propiedad de descomponer el ácido carbónico del aire, sino también de corromper los más puros sentimientos y de poner al descubierto el fondo de los corazones. Es un experimento que pienso comunicar a la Academia de Ciencias y que como todos los grandes inventos se debe a la casualidad... ¡Basta, Tristán!

Aquel noble esposo a quien debía la dignidad y la independencia de su vida, bien merecía la abnegación constante a que ella estaba resuelta. Le había sacrificado su juventud: ¿por qué no continuar el sacrificio? No pensó más en aquellos años en que había una calumnia capaz de corromper la más pura inocencia; pensó en lo presente.

Tanto número de Sectarios, como vemos en nuestros dias, tienen corrompida la imaginacion, y pasa el contagio á corromper el juicio. Imaginan una cosa, y esta hace tan hondas impresiones, que excita continuamente pasiones desmedidas. El juicio entonces dexa libremente llevarse de la fuerza de aquellas imaginaciones, y las tiene por verdaderas, y así ocasionan el error.

En cuanto a que los bufos corrompen o tiran a corromper el buen gusto literario, aún es más infundada la acusación. Pues qué, ¿la música, mala o buena, es incompatible con la discreción, con el sentido común, con el ingenio, con la gracia urbana y con otros requisitos y excelencias de que va o pudiera ir adornada una fábula dramática?

El seductor humano más artificioso y vil, está limitado en cuanto al tiempo y oportunidades de corromper al inocente. Satán tiene constantes e invisibles accesos. Ahora, un padre o guardián que permitiera a los niños a su cargo asociarse con malos caracteres sería justamente condenado como falto del sentimiento, del deber y de humanidad.

Para defenderla a ella, para seguir a su lado, tendría que luchar con su madre, que era el más encarnizado enemigo, perder su cariño, atropellarla tal vez. ¡Oh, no! ¡qué horror! Ya había bastante con aquella crueldad filial que entenebrecía su pasado. ¿Era acaso un ser funesto, nacido para corromper con su nombre lo más santo, lo más puro? No, resígnate, corazón mío.

Calixto, joven de nacimiento distinguido, se enamora ardientemente de la bella Melibea, y no puede conseguir la realización de sus deseos. Acude, pues, á una astuta alcahueta. En virtud de filtros y encantos, de astucias y amaños de todo género, llega al fin á corromper el corazón de la bella Melibea.

Celosos del decoro de la sociedad y del buen nombre del partido, algunos oradores denunciaban á los infames que, disfrazados con el nombre de liberales, iban á corromper á aquella asamblea, á hacer vergonzosos tratos en nombre del Rey, á comprar la elocuencia exaltada y á promover alborotos que no tenían otro objeto que desprestigiar el liberalismo y dar armas á la reacción.