Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 11 de junio de 2025
Hácia las cercanías del Oise y de París se ven extensas canteras de piedra de sillería, caliza en apariencia, pero en su mayor parte de una greda arenosa que se presta mucho á facilitar las inmensas construcciones actuales de París.
Muy distinta de la pizarrosa es la roca caliza que forma algunos de los promontorios avanzados. Cuando se rompe, no se divide, como la pizarra, en innumerables fragmentillos, sino en grandes masas.
Y el señor Fermín, para demostrar el cuidado incesante que durante el año exigía aquel suelo, que era como de oro, agachábase para coger un puñado de caliza y mostraba la finura de sus pequeños terrones blancos y desmenuzados, sin que se dejase apuntar en ellos el germen de una planta parásita.
Los mineros derrumbaban aquí, horadaban allá, cavaban más lejos, rasguñaban en otra parte, rompían la roca cretácea, desbarataban las graciosas láminas de pizarra samnita y esquistosa, despreciaban la caliza arcillosa, apartaban la limonita y el oligisto, destrozaban la preciosa dolomía, revolviendo incesantemente hasta dar con el silicato de zinc, esa plata de Europa, que, no por ser la materia de que se hacen las cacerolas, deja de ser grandiosa fuente de bienestar y civilización.
Los hombres, en camisa y calzoncillos, avanzaban a gatas como corderos blancos. Iban de unas cepas a otras, arrastrando el vientre sobre la tierra caldeada. Los sarmientos esparcían sus pámpanos rojizos y verdes a ras del suelo, y las uvas descansaban en la caliza, que las comunicaba hasta el último instante su generoso calor.
En cuanto fueron bastante numerosas las observaciones comparadas, llegó hasta á ser fácil frecuentemente decir, con sólo ver un fósil, á qué época de las edades terrestres pertenece la roca en que se encontró. ¿Cualquier piedra caliza, de esquisto ó de asperón ofrece clara huella de concha ó de planta? Pues basta á veces con eso.
Y enumeraba las condiciones que debe tener una buena viña jerezana, plantada en tierra caliza, que esté pendiente, para que las lluvias corran y no refresquen en demasía la tierra, quitando fuerza al mosto. Así se producía aquel racimo, gloria del país, con sus granos pequeños como balines, transparentes y de una blancura de marfil.
De allí en adelante, hácia el sud-este, el horizonte se abre y extiende, sin que lo interrumpan mas que colinas verdes ó amarillentas, aisladas y distantes, siempre redondas y casi todas de formacion caliza ó de arenisca, cuya elevacion varia entre 80 y 200 metros al parecer.
En los numerosas sociedades de recreo que ocupaban casi todos los bajos de la calle Larga, no se hablaba de otra cosa. ¿Qué más querían los trabajadores de las viñas?... Ganaban un jornal de diez reales, comían en lebrillos la menestra que ellos mismos se arreglaban sin que el amo interviniese; tenían una hora de descanso en invierno y dos en verano, para no caer asfixiados sobre la tierra caliza que echaba chispas; les concedían ocho cigarros durante la jornada y por las noches dormían, teniendo los más de ellos una sábana sobre las esterillas de enea.
La onda disuelve la parte caliza, se lleva, trae, arrastra incesantemente el sílex que convierte en guijarrillos redondos. Tan rudo trabajo hace de esa costa, riquísima por el lado que mira á la tierra, un verdadero desierto marítimo. Pocas, muy pocas plantas marinas se libran de la trituración eterna del guijarrillo magullado una y otra vez.
Palabra del Dia
Otros Mirando