Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 6 de mayo de 2025


Juanito miraba a la joven con tierna simpatía. ¡Era tan buena muchacha...! Para convencerse, bastaba verla por la calle con el velo caído sobre los ojos bajos, andando con paso menudo y gracioso, arrimada siempre a la pared, como si quisiera evitar la atención de los transeúntes. Su belleza no era gran cosa.

Con cuánto placer agitarse sobre un solo bergantin la bandera tricolor de mi querida pero pobre patria!... Yo la saludé con respeto y amor, entonando en el fondo de mi corazon un himno de gratitud á los fundadores de la independencia de mi pais! Era una sola, entre mil banderas distintas, pero una sola me bastaba....

Juzgue usted del contento que sucedió en su alma a tantas inquietudes y dolores, cuando supo que se le daba a mi madre por esposa. Pero, como a él no le bastaba con experimentar semejante alegría, sintió la necesidad de hacerla compartir. Saumur no estaba lejos del cuartel general del ejército.

Para defenderse de él, no bastaba la frialdad ingénita contra la seducción por los sentidos, pues aún fingía más astutamente la ternura cariñosa con que se conquista el alma, que la exaltación apasionada con que se vence a la materia.

, el destino, pensaba el Magistral, no quería decirse a mismo la Providencia; nada de teología, nada de quebraderos de cabeza que habían hecho de su adolescencia y primera juventud un desierto estéril por donde sólo pasaban fantasmas, aprensiones de loco, figuras apocalípticas. Bastaba para siempre de todo aquello.

Evidentemente, la mujer está llamada por la naturaleza á no poder vivir sin una pasion efectiva; su ciencia grande, su gran vida tiene por centro el corazon. Por esto mismo es la destinada á concebirnos en sus entrañas y á darnos su sangre con placer. No bastaba el tierno alimento con que nos nutre.

Alguna vez una frase cuyo sentido no estaba definido para , un recuerdo de otros tiempos, evocado por alguno de aquellos que le habían visto nacer y le decían: «¿Se acuerda, señoralgunas veces, una frase bastaba para hacerle cambiar el gesto y sumirle en embarazoso silencio.

La campana de la chimenea, muy alta y estrecha, bastaba apenas para dar salida a las nubes de humo que se desprendían del llar.

Ante el esplendor glorioso de aquel ocaso Mario permaneció inmóvil de sorpresa y admiración. En el paisaje no había más que luz, pero la luz bastaba para llenar de colores y formas el cielo y la llanura. Allá a lo lejos las torres de Madrid temblaban en un vapor azulado debajo de la fantástica ciudad flotante de las nubes.

Ella replicaba que sólo se adora a Dios y a los santos, que le bastaba ser querida, pero muy querida, y que la única ambición de su vida era ser mi mujercita, que yo la llevase a donde bien quisiera, aunque fuese a Galicia. Viendo sus ojos posarse sobre los míos anhelantes, escuchando su dulce acento enternecido, cualquiera diría que estaba profundamente enamorada de .

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando