United States or Cambodia ? Vote for the TOP Country of the Week !


En resolución, Sancho, o vos habéis de ser azotado, o os han de azotar, o no habéis de ser gobernador. -Señor -respondió Sancho-, ¿no se me darían dos días de término para pensar lo que me está mejor?

Todos hablaban; Paco quería también secularizar a las monjas; Joaquinito Orgaz comenzó a decir chistes flamencos que hacían mucha gracia a la Marquesa y a Edelmira. Visitación llegó a levantarse de la mesa para azotar con el abanico abierto a los que manifestaban ideas poco ortodoxas.

Trabajan duramente verano y otoño, y cuando el viento pampero empieza á azotar las llanuras, asustados por la proximidad del invierno, regresan á los lugares de procedencia, donde la tierra empieza á despertar entonces bajo las primeras caricias primaverales.

Ya me han dicho que quieres casarte con la chiquilla de Calderón.... Pues hijo, horroroso y ella más fea que azotar a un Cristo, vais a echar unos nenes que habrá que enseñarlos en una barraca. Adiós, Pepe: no te olvides de los boquerones. Ya sabes que no ceno sin ellos. Hasta luego.

El rumor que producía al azotar el pavimento, era dulce y gozoso.

Zaldumbide era muy político; cuando bajaba a tierra a visitar al rey Badegú o al mariscal Taparrabo, les rogaba que mandasen azotar a los negros que iban a vender. Los otros lo hacían sin ningún inconveniente.

Si alguno omite este requisito le hacen cargo de ello, y teniéndolo por prueba de soberbia, lo vuelven a mandar azotar para que se humille, quiera o no quiera.

En este instante le ocurriéron á Candido las siguientes ideas, y discurrió así: Si pide auxîlio este varon santo, infaliblemente me hará quemar, y otro tanto podrá hacer á Cunegunda; me ha hecho azotar sin misericordia, es mi contrincante, y yo estoy de vena de matar; pues no hay que detenerse.

Castigar estos escesos de la plebe quisieron el alguacil mayor de Sevilla don Alvar Perez de Guzman i los dos alcaldes Rui Perez de Esquivel i Fernan Arias de Quadros, i para ello prendieron á varios del pueblo, cabezas en aquellos desmanes, i mandaron azotar á dos públicamente el miércoles de ceniza dia 15 de Marzo del año de 1391.

Pero el Conde ha rehusado altivamente, preguntándome quién era... ¡Quién era, señora!... ¡cuando se trataba de morir!... ¡Huérfano, bastardo tal vez, no tengo derecho a que me mate un noble, un señor!... el conde de Pópoli. Parece que es un crimen aspirar a este honor, porque el señor Duque me hizo azotar. »¡A usted, Carlos! », azotado...