Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 25 de mayo de 2025
Después hubo gran tertulia en el salón; pero poco después de las doce se habían retirado todos. Durmió Jacinta sin sosiego, y a la mañana siguiente, cuando su marido no había despertado aún, salió para ir a misa. Oyola en San Ginés, y después fue a casa de Benigna, donde encontró escenas de desolación.
La Avenida de Diana debía su nombre a una antigua estatua, cuyo zócalo era lo único que quedaba en pie. Lugar tan retirado y misterioso, era a propósito para paseos y coloquios de enamorados. Pero, sin embargo, fue una grande imprudencia la de Juana, la de elegirlo para su despedida del oficial de cazadores.
Miró al corredor y cerciorándose de que la vieja se había ya retirado, exclamó con voz sorda: ¡Ande allá, abuela, que tiene usted la cara más fea que la papeleta de la contribución! Y se encaminó á la casa en busca de la guadaña acompañado de la risa y algazara de los espectadores.
Golbasto, el gran poeta nacional, se había retirado jurando vengarse del bárbaro intruso. Los concurrentes le vieron con un vendaje debajo de su corona de laurel, pues se había descalabrado al caer al suelo con Momaren bajo el disparo del gigante. ¿Qué ha hecho usted? volvió á repetir el profesor.
Entre mis más antiguos clientes cuento, señor, á un honrado comerciante retirado, poco ha, de los negocios, que vive holgadamente en compañía de una hija única, á la que adora como es natural, y que goza de una aurea mediocritas que avalúo en veinticinco mil libras de renta.
Aquella noche fue, en efecto, Miguel con su tío a casa de la intendenta, quien le recibió con mucho agasajo: no tanto a los tres o cuatro amigos de que había hablado tío Manolo, y que fueron entrando uno después de otro. Todos ellos eran entrados en días; uno era coronel retirado; otro, catedrático de matemáticas en la facultad de ciencias; otro, ex-gobernador de provincia.
Retirado ahora de esta fabricación y comercio, se dedica a prestar al gobierno y a los particulares al cincuenta por ciento al año. Con tales virtudes, excelencias y servicios, no debe chocarnos que haya merecido el favor de la emperatriz y de sus ministros, los cuales le colman de distinciones.
Al fin me hallé frente a frente del administrador, un señor anciano, pálido, bigote y perilla blancos, traza de militar retirado y gorro de terciopelo azul en la cabeza. ¿Qué se le ofrece a usted? Esta pregunta me pareció tan inaudita, tan bárbara, que me quedé clavado en el suelo, mirándole con espanto. Vamos, caballero, ¿qué se le ofrece a usted?
Es verdad, Grano de Sal. ¡Dios de Dios! ¡qué hombre! ¡y le querían en toda la comarca! Un desgraciado marinero le pedía algo, y lo obtenía al instante. En fin, desde hace veinte años que se había retirado de los negocios para vivir de sus rentas, todos se hacían lenguas de su caridad.
Vivia retirado y tranquilo en el seno de su familia, cuando se le asechó y prendió para someterle á un juicio, en que, por crímenes imaginarios, se le condenó á perecer barbaramente en un cadalso.
Palabra del Dia
Otros Mirando