Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 7 de junio de 2025
Ya se disponía saltando a recibirla, cuando María, oyendo las razones lastimosas de Gerif, anudada de dolor la garganta, y ahogando el pecho con mil suspiros y angustias, vacila y se detiene, y olvidada de todo, resuelve volver al querido tío, abrazarlo y no desampararlo. Tales quejas le habrían quebrantado un pecho que tuviese de pedernal, no que el suyo tan lleno de agradecimiento y piedad.
Yo no soy un hombre: las enfermedades de la miseria y la ferocidad de mis semejantes han quebrantado mi organismo. Apenas si logro sostener mi vida y no puedo darla a otro ser. Tú llevas en la sangre el veneno de una civilización viciada. Un hijo de tus entrañas sería un mísero engendro, con los huesos cariados y las venas llenas de podredumbre.
Vinieron luego otras cosillas, menudencias si se quiere, pero como caían sobre un espíritu ya quebrantado, resultaban con mayor pesadumbre de la que por sí tenían. Porque Juan, desde que se puso bueno y tomó calle, dejó de estar tan expansivo, sobón y dengoso como en los días del encierro, y se acabaron aquellas escenas nocturnas en que la confianza imitaba el lenguaje de la inocencia.
El ministro, por el contrario, nunca había pasado por una experiencia tal que le condujera á poner en tela de juicio las leyes generalmente aceptadas; bien que en una sola ocasión hubiera quebrantado una de las más sagradas. Pero esto había sido un pecado cometido por la pasión, no las consecuencias de principios determinados, ni siquiera de un propósito.
Sonaban los aplausos, pero eran flojos y desmayados después de las anteriores ovaciones. El público estaba quebrantado por el delirio de su entusiasmo, y atendía distraídamente a los lances que se desarrollaban en el redondel. Se entablaban vehementes discusiones de grada a grada.
Delante de esta sombra era Lázaro muy elocuente, y siempre acertaba á expresar lo que sentía; y sentía tanto el pobre, que á veces le daba uno de esos accesos vehementes, en que el organismo se conmueve todo, quebrantado y oprimido por la enorme expansión del espíritu. Salía de la casa por no hallarse bien en ella, y volvía á entrar por no hallarse bien fuera.
3 Porque ha perseguido el enemigo mi alma; ha quebrantado en tierra mi vida; me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos. 4 Y mi espíritu se angustió dentro de mí; se pasmó mi corazón. 5 Me acordé de los días antiguos; meditaba en todas tus obras, meditaba en las obras de tus manos. 6 Extendí mis manos a ti; mi alma a ti como la tierra sedienta.
10 No se han quebrantado hasta el día de hoy, ni han tenido temor, ni han caminado en mi ley, ni en mis derechos que puse delante de vosotros y delante de vuestros padres. 11 Por tanto, así dijo el SE
Con éstas y otras cosas nos anocheció en Chiclana, y mi amo, atrozmente quebrantado y molido a causa del movimiento del fementido calesín, se quedó en dicho pueblo, mientras los demás siguieron, deseosos de llegar a Cádiz en la misma noche.
A otros curas les he oído muchos casos semejantes, ya de acusarse de haber faltado al precepto de la misa más veces que los días a que están obligados en el año, otros en haber quebrantado el ayuno en mayor número que les obliga, y de algunos que han confesado pecados que moralmente es imposible que ellos los hayan cometido, y que examinándolos bien hallan ser mentira fraguada para confesarse de algo, por no tener hecho examen, o no querer confesarse de lo que verdaderamente han hecho, y parecerles que el padre no los ha de creer si no se acusan de muchos y graves pecados.
Palabra del Dia
Otros Mirando