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Actualizado: 13 de octubre de 2025
Hubo un momento en que Bonis creyó sentir los afilados dientes de su mujer en la carne del cuello. En efecto; poco después se presentaba el primo Sebastián, pálido; y a los cinco minutos Marta, muy contrariada, porque aquello podía retrasar algunos días su próximo enlace, y tal vez el bautizo eclipsara la boda.
Yo había nacido positivamente para la pobreza, para las privaciones, para la abnegación y el sacrificio, pero he sido contrariada. Por ejemplo, á mí no me habría disgustado un marido enfermo. ¡Pues bien! el señor Laroque era un hombre de excelente salud. Vea usted ahí, cómo mi destino ha sido y será siempre contrariado desde el principio hasta el fin...
Querría librarse de su propio martirio, y, cogiendo la mano de Martín, le dice desde el fondo del corazón: ¡Oh! sí ¡todo marchará bien, todo se arreglará! ¿Por qué no? balbucea el otro. Menea la cabeza, fija un instante sus miradas delante de él, con la frente pensativa, y después, con expresión contrariada: Vete a dormir, Juan. La rueda rota está dando vueltas en tu cabeza.
Las solteras forzosas han gritado tanto sus desilusiones, que el mundo, generalmente poco benévolo, ha creído que todas las solteras estaban en el mismo caso. ¡Vírgenes y mártires! exclamó muy contrariada por esta nueva concepción. ¡Es completo! La de Ribert y Genoveva se echaron a reír. Mi consternación les divertía.
Paco estaba mudo, extático, lleno de asombro, con la boca abierta, y sin saber qué pensar ni qué decir. Beatriz, con más agitación, contrariada, impaciente por la inmovilidad de Paco, prosiguió de esta suerte: No te detengas: vuela, busca a Braulio. Se va a matar si te tardas.
Marta, sin motivo legítimo, estaba contrariada, y había puesto el gesto de vinagre que a veces se le asomaba al rostro sin saberlo ella, y la hacía más vieja y más fea; gesto que particularmente se le descubría cuando envidiaba algo, cuando se sentía deslumbrada. Veía en el bautizo el eclipse de su boda. A mí dijo , Antoñito no me recuerda ni el tipo Valcárcel, ni el tipo Reyes. Parece extranjero.
Tocóle la vez de enfurecerse a Isabel Mazacán, y mientras el viejo Butrón disimulaba un repentino sobresalto, como si juzgase aquel nombramiento cosa de grave peligro, dijo ella muy contrariada por el fiasco de su noticia: Pues, señor, ¡me pasmo de su pasmo de ustedes!... ¿A qué viene ese espanto?... ¿Acaso Curra ha tenido alguna vez vergüenza?
Palabra del Dia
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