United States or Pitcairn Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


Los salvajes gritos de los mochuelos, el murmullo intermitente de las aguas y el vespertino canto de los insectos, añadían todavía mayor tristeza a la impresión de soledad que oprimía el corazón de Francisco. Desde que las confidencias de la señora Liénard habían derribado sus castillos en el aire sentíase dolorosamente desencantado.

Yégof había cenado con nosotros y nos había distraído con la historia de sus tesoros, de sus castillos y de sus provincias.

El maldito tenía en aquella época la demencia de los castillos; estaba haciendo averiguaciones sobre todos los que en España existen más o menos ruinosos, para escribir una gran obra heráldica, arqueológica y de castrametación sentimental, que aunque estuviese bien hecha no había de servir para nada.

Luego Roma fue dueña de todos los países que tenía alrededor, hasta que tuvo tantos pueblos que no los pudo gobernar, y cada pueblo se fue haciendo libre y nombrando su rey, que era el guerrero más poderoso de todos los del país, y vivía en su castillo de piedra, con torres y portalones, como todos los que llamaban «señores» en aquel tiempo de pelear; y la gente de trabajo vivía alrededor de los castillos, en casuchos infelices.

No hay duda por los pormenores que se consignan en el documento anterior y por los que contiene el que vamos seguidamente á extractar, que estos «castillos» fueron los primitivos «carrosasí como la asistencia en la procesión de los gremios con sus pendones.

En el de delante iban los combatientes; en el centro, bajo e indefenso, la chusma; en la popa, el jefe y su séquito. Al venir tiempos de paz y seguridad, los progresos de la arquitectura naval fueron rebajando los castillos esculpidos como altares, con mascarones, tritones y ondinas; pero la popa continuó siendo el lugar de honor, el aposento de los privilegiados.

Tenia esta señora la tercera parte de la isla de Negroponte, y de trece Castillos en la tierra firme del Ducado de Athenas. El Infante Don Alfonso tuvo en ella muchos hijos, y ella vino á ser una de las mujeres mas señaladas de su tiempo, aunque Zurita no siente en esto como Montaner á quien yo sigo.

Donde quiera se destacan, sobre colinas revueltas de lava petrificada, castillos estupendos de titánico aspecto, Bastillas seculares de la feudalidad casi muerta en el mundo, pero todavía muy resistentes en Alemania; ó ruinas monstruosas y sombrías, pero imponentes aún, osamentas destrozadas de diez generaciones de tiranos y bandidos nobles, petrificadas sobre el lecho volcánico que los propietarios escogieron en armonía con su terrible mision.

Por todas partes campos cultivados primorosamente, ciudades y pueblos, casas; campestres, anchurosos caminos carreteros, numerosísimas barcas en los rios, viejos castillos feudales sobre las cimas escarpadas de los cerros; y todo cubierto por un cielo magnífico, muy de extrañar en el mes de marzo aun.