Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 14 de octubre de 2025
Con esto quedaron nuestros Catalanes, y Aragoneses señores de aquel Estado, y Provincia, al cabo de trece años de guerra; y con esto dieron fin á toda su peregrinacion, y asentaron su morada gozando de las haciendas, y mugeres de los vencidos.
Responder quisiera don Quijote, pero estorbáronlo el duque y la duquesa, que entraron a verle, entre los cuales pasaron una larga y dulce plática, en la cual dijo Sancho tantos donaires y tantas malicias, que dejaron de nuevo admirados a los duques, así con su simplicidad como con su agudeza. Don Quijote les suplicó le diesen licencia para partirse aquel mismo día, pues a los vencidos caballeros, como él, más les convenía habitar una zahúrda que no reales palacios. Diéronsela de muy buena gana, y la duquesa le preguntó si quedaba en su gracia Altisidora.
Curemo allí salió disimulando El juramento hecho que tenia: Garay se llega á priesa, caminando Con gran estruendo, grita y vocería. Los indios que le estaban esperando, Vencidos de temor y cobardía, Tras la chusma se fueron, mas Curemo Mostrado ha su valor por gran estremo.
¡Váleme Dios! -dijo, así como conoció la estancia- y ¿qué será esto? Sí que en esta casa todo es cortesía y buen comedimiento, pero para los vencidos el bien se vuelve en mal y el mal en peor. Entraron al patio principal del castillo, y viéronle aderezado y puesto de manera que les acrecentó la admiración y les dobló el miedo, como se verá en el siguiente capítulo.
Con estas cosas se animaba mucho el enfermo; pero ¡ay!, que el día siguiente había de ser de los más negros de su vida. ¡Pobre señor!, después de haber pasado la noche muy inquieto, observó por la mañana una pérdida casi absoluta de la facultad de ver. El médico estaba tan aturdido, que ni aun acertó con las fórmulas escurridizas que ellos emplean cuando no quieren confesarse vencidos.
A la calamidad de quedar vencidos no quisieron los quirites añadir la calamidad de ser despóticamente gobernados. Dice doña Emilia, y tiene razón hasta cierto punto, que la libertad no es un fin, sino un medio; pero la dictadura, no hasta cierto punto, sino en absoluto, es siempre un medio y no un fin.
Los Turcos tenian tambien igual peligro; porque los naturales de aquellas Provincias Cristianas á donde estaban, viéndoles rotos y vencidos, les acabáran sin duda, satisfaciendo en ellos una justa venganza.
En ellos vese ostensible el gusto artistico de los vencidos, y cómo se lo adaptaron los vencedores; ¿qué mucho, pues, que los telares sevillanos fuesen desde entonces famosos, cuando el mismo monarca y sus hijos no desdeñaban de emplear en sus vestiduras telas sarracenas, hasta con leyendas alcoránicas?
Alfonso VI, en tres días, viene sobre Toledo desde el fondo de Castilla, dispuesto a matar al arzobispo y aun a su propia mujer por este atentado que pone en entredicho su palabra de caballero; pero tan grande es su furia, que los mismos árabes se conmueven; el alfaquí sale a su encuentro para rogarle que respete lo hecho, ya que los perjudicados se conforman, y en nombre de los vencidos le releva de cumplir su palabra, pues la posesión de un edificio no es motivo bastante para que se altere la paz.
Cuando vio a las claras que sus soldados habían sido vencidos, que la plebe triunfante había invadido la fortaleza y que ya se disponía a romper las puertas y a entrar en el alcázar, su desesperación fue completa y horrible. Abdul ben Hixen se jactaba de su nobilísima estirpe. Pretendía descender, por una ilustre serie de monarcas guerreros, del propio Mohamud de Gazna el Grande.
Palabra del Dia
Otros Mirando