Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 17 de junio de 2025


Pero pasados los cuales, i viendo que por todos lados no encontraban mas que desdichas, avisaron al conde de Borba, comandante portugués del presidio de Arcilla, que estaban en ánimo de cristianarse i de volver á España, i que así les facilitase los medios de poner en debida ejecucion lo que habian imaginado.

Otro carácter que se debe consignar, es el que consiste en la disposicion particular de la piel á lesiones, que asténicas en un principio, no dejan de acompañarlas algunos fenómenos de irritacion, si bien estos aceleran el movimiento de descomposicion y no el de restauracion: esta exaltacion de la fuerza de descomposicion y de eliminacion quizá no sea debida mas que á el processus plástico, lo cual esplicaria tambien la falta de colecciones serosas, de exudaciones y de hipertrofias, entre los fenómenos atribuidos á la alúmina.

¿Qué le parece á V. de los hijos que se portan mal con los padres, y no corresponden con la debida gratitud al amor que estos les prodigaron? Que faltan á un deber sagrado y desoyen la voz de la naturaleza. Pero ¿cómo es que vemos tan á menudo á los hijos no cumplir como deben con sus padres, miéntras estos si en algo faltan, suele ser por sobreabundancia de amor y ternura?

En resúmen, creo que los fenómenos del ciego de Cheselden solo prueban que la vista, como todos los demás sentidos, ha menester cierta educacion; que sus primeras impresiones son por necesidad confusas; que el órgano no adquiere la debida robustez y precision sino despues de largo ejercicio; y finalmente que los juicios formados en consecuencia, han de ser muy inexactos, hasta que la comparacion acompañada de la reflexion haya enseñado á rectificar las equivocaciones.

De siglo en siglo, de año en año, de día en día, ese río que parece débil ante el poderoso mar, consigue penetrar en él, y hasta se puede calcular cuánto avanzará en un período dado por la uniformidad de su marcha. Pues bien, esta victoria del río sobre el océano, es debida á los mil pequeños arroyuelos y arroyos de las laderas y los montes.

En seguida le sirvieron en el mismo gabinete, donde ardía un fuego delicioso, una taza de caldo confortador y después algunas viandas, aunque con la debida cautela, por la flojedad en que debía hallarse su estómago: subieron además de la bodega el vino más exquisito y añejo.

Exâmina primero si hay la cosa, y esto lo hace por la debida y bien reglada aplicacion de los sentidos, ó por el bien dirigido juicio, que tiene por origen de su excitamento las representaciones que de estos han quedado en la fantasía.

¡Phs!... , , algunos. Como este relato es una verdadera confesión, declaro que aquel «¡Phs!», pronunciado con indiferencia desdeñosa, quería significar que yo, como gran poeta también, no estaba obligado a admirarme de otros grandes poetas, sino a profesarles tan sólo la estimación debida a los compañeros. Que se me perdone esta flaqueza que confieso. Otros las tienen y no las confiesan.

Guárdese pues todo, con la debida separacion; que si lo apócrifo no sirve para fundar derechos ni defenderlos, puede servir para la historia del mismo archivo, lo que no es de poca importancia para distinguir lo apócrifo de lo auténtico.

Que al Exmo. Cabildo le sea facultativo nombrar Presidente y mas vocales, si lo tuviere por conveniente; teniendo la debida consideracion al mérito y circunstancias del Exmo. Sr. Virey, y magistrados subalternos, y sobre todo á los que contemple mas capaces de desempeñar el cargo. Que tiene tambien por conveniente, y aun necesario, que el Sr.

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando