Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 20 de mayo de 2025


El Padre Cipriano Baracé emprendió, en el mismo año, un viage por las llanuras del este y del sudeste hasta una distancia de sesenta leguas, llegando á visitar á los Guarayos que hablan el idioma guaraní , y á los Tapacuras y pacíficos Baures; mas no pudo hacer otro tanto con los Yaguehuares, nacion de un carácter feroz.

La maldad, existente en y para , la ha personificado Calderón en el demonio con singular maestría, principalmente con el objeto de que, bajo esta forma, se revele poco á poco á San Cipriano.» K. Rosenkranz. Las leyendas más completas de El purgatorio de San Patricio, se encuentran reunidas en Th. Wright, St.

Vita et Martyrium F. Cypriani et Justinae, autore Simeone Metaphraste. Sobre Cipriano, ved también á Gregorii Naz. Opera, ed.

Puede haber sido dependencia de la parroquia; pudiera quizás tambien haber servido de asilo á algunas religiosas ahuyentadas de su monasterio de la Sierra cuando las del monasterio Tabanense, entregado á las llamas, se refugiaron asimismo en una casa contigua á la basílica de S. Cipriano.

En el mismo momento se abrió la puerta, y Cipriano se adelantó hacia Jacobo con las manos tendidas, sonriente y dichoso. ¡Y bien! ¿Nuestro pasajero empieza á reponerse de sus emociones? Vuestro protegido no tendrá bastante con todo su corazón para agradecer lo que habéis hecho por él. Querido amigo, nos quedan dos meses de vivir juntos y tendremos tiempo para congratularnos mutuamente.

Justina, hija de una mártir cristiana, es elegida para este objeto, y para ser también la segunda víctima del infernal corruptor. El plan se pone al punto en ejecución. Floro y Lelio, dos jóvenes enamorados ciegamente de Justina, pero no correspondidos por ella, invocan la mediación de Cipriano. Este accede á sus ruegos, pero siente en seguida una pasión furiosa por la bella cristiana.

Ya tendrá usted la prueba. Pero es importante que hable con la señora de Freneuse. El señor Marenval va á pedir que me reciba. Condúzcale usted y yo esperaré que me llamen. Entró en la pieza donde Marenval había interrogado tan largamente á Giraud acerca de Sorege, y el criado y Cipriano se encaminaron al salón en el que aquella madre desconsolada pasaba su existencia sin esperanza.

La señora de Freneuse miró con extrañeza mezclada de asombro á Cipriano y éste añadió con acento de bondad: Tragomer me lo ha prometido y tengo confianza en él. Pero ¿cómo sabremos lo que suceda? Todo lo he previsto. Mi ayuda de cámara recibirá nuestras cartas y se las traerá á ustedes; así estarán al corriente, sin recibir una correspondencia directa.

Tragomer fué el primero que tomó la palabra y dijo con su habitual sangre fría: Mi querido Jacobo, tu sincera confesión tiene el mérito de no dejar duda alguna en nuestro espíritu. Adivino en la satisfacción de Marenval que la verdad le salta á los ojos como á . Perfectamente, apoyó Cipriano. Es claro como la luz del día.

Entre todas esas casas silenciosas y negras, hechas para el duelo, la tristeza y la mala suerte, ninguna más lúgubre que la situada en la calle de Petits-Champs, número 47 duplicado, ante la cual se detuvo muy temprano, el primer día de Pascua de Navidad, el coche de Cipriano Marenval.

Palabra del Dia

santificación

Otros Mirando