Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 27 de junio de 2025


6 Y puso capitanes de guerra sobre el pueblo, y los hizo reunir así en la plaza de la puerta de la ciudad, y les habló al corazón de ellos, diciendo: 8 Con él es el brazo de carne, mas con nosotros el SE

La respuesta de Andronico llegó á los oidos de los de Galípoli, y fué tan grande el alboroto y motin que causó en todo el campo, que forzaron á los Capitanes á tomar las armas para acometer los lugares del Imperio, y apoderarse de algunas fuerzas y presidios.

El capitán lo era, lo mismo que su camarilla o guardia negra, con quien se entendía en vascuence. Yo iba a formar parte de esta camarilla. No era raro, síno muy frecuente, que los armadores de barcos corsarios o negreros escogieran capitanes de puertos lejanos; así, los de Saint-Malô tomaban un capitán de Burdeos; los de aquí, uno del Havre o de Honfleur.

Publicóse la jornada, y los Capitanes recogieron su gente en Mecina, donde la armada se aprestaba, que en pocos dias estuvo en órden para navegar.

Eran dos capitanes muy jóvenes. Toledo les supuso veinticinco ó veintiséis años de edad. Su uniforme muy ceñido al talle, su kepis de última moda, su apostura gallarda, placieron al coronel, que los calificó inmediatamente de militares de carrera. Debían proceder de la Escuela de Saint-Cyr; su ojo de profesional no podía engañarse: eran otra cosa que el humilde Martínez.

Quedó en el fuerte por su Lugarteniente el señor D. Alvaro de Sande, Coronel de la infantería española, y así habiendo quedado con él todos los capitanes y soldados muy alegres y contentos por hallarse en semejante empresa contra los infieles enemigos de Jesucristo, y esperando la victoria con el ayuda de Dios, y de cobrar lo perdido.

Ya no dudó que en la carrera de las armas, siguiendo el ejemplo de sus antepasados, pudiera ser tan útil a Dios y a la Santa Iglesia como en el claustro o en el púlpito. Diose entonces a descifrar los añejos pergaminos de su familia y a leer la historia de los grandes capitanes de Roma y España.

Fueron tantos sus muertos, que cuando estaban ya apiladas sus cabezas en el campo de batalla, no podia un ginete ver á su compañeroNuestros historiadores no hacen mencion de esta derrota; al contrario, pintan bajo el reinado de D. Alfonso el Casto muy crudamente escarmentados á los capitanes de Abde-r-rahman II en los acontecimientos de Galicia.

Pero Dios Nuestro Señor que había tomado á su cuenta el castigo de las maldades de aquellos malvados, quiso que pagasen ahora la pena, y singularmente los capitanes, que aquí quedaron muertos, pagando juntamente de una vez todas las deudas de las iniquidades que habían cometido en la destrucción de los pueblos de Villarica del Espíritu Santo en la gobernación del Paraguay, disponiendo fuese la victoria, no á costa de mucha sangre de ambas partes como se pensaba, sino á costa de los nuestros y á mucha de los enemigos; porque mientras un indio intimaba el orden á los enemigos, adelantándose ciertos soldados para recibir las armas de los capitanes, un criado de éstos les detuvo disparándoles un fusilazo, matando á uno de ellos.

Más adelante, al entrar en años, las muchachas de la Guardia y las del casco con aletas, como usted dice, se hacen prudentes y mesuradas, se casan y forman una familia. ¡Pero si usted viese lo que dan que hacer mientras tanto á sus coroneles y capitanes, personas expertas que han tenido hijos y conocen las exigencias de la vida!...

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando