Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 25 de junio de 2025


Parecía, en cambio, que no había cuadrúpedos en aquella parte de la Isla, pues ni se veían puercos salvajes, ni babirusos ni otros animales que tanto abundan en otras regiones de ella. Hacia las tres, al atravesar un claro del bosque, hicieron un descubrimiento singular nuestros viajeros.

Para elevarse al concepto y la emoción del bosque, o alongarse de él y tomarlo en conjunto, o sumirse dentro de él; en las lindes y a corto trecho, los árboles estorban ver el bosque. Para ascender al concepto y la emoción de la vida, o situarse en el punto de vista de Sirio, como hace el filósofo, o zambullirse, con todas las potencias, en los dramas individuales.

Le vi a treinta varas de distancia, corriendo como un gamo en dirección al bosque. Era la primera vez que Ruperto se mostraba más prudente que animoso. Corrí tras él, gritándole que se detuviese, pero no me hizo caso. Ileso y ágil ganaba terreno a cada paso; pero yo, olvidado de todo, excepto del deseo de vengarme, seguí sus huellas y muy pronto desaparecimos ambos en el bosque de Zenda.

Su cara poco ovalada estaba hundida en medio de un bosque de pelo, a que correspondía una barba igualmente espesa, igualmente crespa y negra, que subía hasta los pómulos, bastante pronunciados, para descubrir una voluntad firme y tenaz.

Capítulo XIV. Donde se prosigue la aventura del Caballero del Bosque Entre muchas razones que pasaron don Quijote y el Caballero de la Selva, dice la historia que el del Bosque dijo a don Quijote: -Finalmente, señor caballero, quiero que sepáis que mi destino, o, por mejor decir, mi elección, me trujo a enamorar de la sin par Casildea de Vandalia.

Gustábame recorrer sola los senderos del bosque y permanecía durante horas enteras junto a la cascada, recordando nuestra última entrevista y pensando en lo que haría si me le viese aparecer alegre y encantador, con aquella expresión en los ojos que me había agradado tanto en el Zarzal y que después no había vuelto a ver brillar para .

Antes de llegar a la posta del Ojo de Agua, un joven sale del bosque y se dirige hacia la galera, requiriendo al postillón que se detenga.

Metióse las manos en los bolsillos, y miró detenidamente aquella inextricable maraña, silbando débilmente aires truncos. Después de observar de nuevo el bosque a uno y otro lado, retornó bastante desilusionado. Al día siguiente, sin embargo, recorrió la picada central por espacio de una legua, y aunque su fusil volvió profundamente dormido, Benincasa no deploró el paseo.

En esta misma jornada el bosque ostenta el hermoso follage de un gran número de palmas de nuevas y diferentes especies, entre las cuales se distinguen la palma viña y la de vinte pes. El rio se manifiesta entretanto mas angosto, y ya se advierten sobre sus orillas algunas otras plantas, como las cañas y los lisos, cuyas hojas blanquizcas resaltan sobre el fondo oscuro del sombrío boscage.

Pasáronse dos días sin que los Quiriquicas saliesen fuera de las tinieblas de aquel bosque; por lo cual, desesperanzado Patozi de poder hacer las paces y establecer una mutua amistad, á cuyo fin había venido, tuvo por mejor dar la vuelta, y persuadió á esto al P. Lucas con cuantas razones y súplicas le dictó su afecto; y sobre todo, ponderando cuanto fué posible el manifiesto peligro en que quedaba de que los Quiriquicas desahogasen en él sólo la fiereza del odio que contra todos habían concebido.

Palabra del Dia

metropolitanos

Otros Mirando