Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 21 de julio de 2025
26 Por tanto, yo os protesto el día de hoy, que yo soy limpio de la sangre de todos; 27 porque no he rehuido de anunciaros todo el consejo de Dios. 28 Por tanto mirad por vosotros y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la Iglesia de Dios, la cual ganó por su sangre.
Soldados, les dijo, vengo á anunciaros que la Guardia Blanca acaba de ser objeto de un alto honor. El príncipe nos ha elegido para formar la vanguardia y seremos los primeros en atacar al enemigo. Si alguno de vosotros vacila en este momento.... ¡Os seguiremos hasta el último! ¡Viva nuestro capitán! gritaron á una los arqueros. Bien está. ¡Por San Jorge! no esperaba menos de vosotros.
19 sirviendo al Señor con toda humildad, y con muchas lágrimas, y tentaciones que me han venido por las asechanzas de los judíos; 20 como nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas, 21 testificando a los judíos y a los gentiles el arrepentimiento hacía Dios, y la fe en nuestro Señor Jesús, el Cristo.
1 Así que, hermanos, cuando fui a vosotros, no fui con altivez de palabra, o de sabiduría, a anunciaros el testimonio de Dios. 2 Porque no me juzgué saber algo entre vosotros, sino a Jesús el Cristo, y a este colgado en el madero. 3 Y estuve yo con vosotros con flaqueza, y mucho temor y temblor. 5 para que vuestra fe no esté fundada en sabiduría de hombres, sino en potencia de Dios.
Señor duque le dijo , voy a causaros una gran sorpresa, porque vengo a tomar vuestras órdenes, a daros gracias por tantas bondades y a anunciaros mi inmediata partida. ¡Partir! exclamó el duque, con la expresión de la más viva sorpresa. Sí, señor, sin demora. ¿Sin demora? ¿Y María? María no viene conmigo. Vamos, don Federico, os chanceáis. No puede ser.
2 pues aun habiendo padecido antes, y sido afrentados en Filipos, como sabéis, tuvimos denuedo en nuestro Dios para anunciaros el Evangelio de Dios con mucha diligencia. 3 Porque nuestra exhortación no fue de error, ni de inmundicia, ni por engaño;
Palabra del Dia
Otros Mirando