United States or Eritrea ? Vote for the TOP Country of the Week !


Cerca de la playa en esta parte hay dos colinas pequeñas y redondas, llamadas los Cerros de los Lobos Marinos. La playa consiste en peñas altas, y grandes piedras. Mas abajo, hácia el sur, toda la boca del rio Colorado, ó primer Desaguadero tiene sus orillas perpendiculares, de tan grande altura que inspira horror al mirarlas; pero terminan en arenas, y bajios.

El primero, es la quietud, la segunda, el errante viajero que termina sus días ó en la inhospitalaria playa que sepulta sus despojos, ó en las embravecidas ondas que en vertiginoso remolino lo llevan á dormir el sueño eterno á sus misteriosos lechos de coral.... El Sorsogon navega á toda máquina por la extensa bahía.

A pesar de todo, ¿no éramos hermanos? También ellos me parecía que nos miraban sin ira, pero al salir del agua sacudían su larga y negra cabellera, alejándose altivamente sin volver la cabeza, desapareciendo muy pronto tras un saliente de la playa. #La pesca#

Entonces aquellos desgraciados, pálidos y maltrechos, se miraron con espanto, y de un brinco se plantaron en la playa, echando a correr con toda la velocidad de sus piernas, como si el gitano les pisara los talones.

Existen en Tiui curiosos restos de fortalezas construídas, en lo antiguo para evitar las piraterías de los moros. Las tradiciones de este pueblo conservarán eternamente en sus memorias los desembarcos piráticos verificados en 1841 y 45. En esta última fecha los moros redujeron á cenizas el primitivo pueblo de Tiui que se encontraba asentado en la misma playa.

Caminó prósperamente por muchos días, hasta que llegó á aquella isla en cuya playa yacían tendidos los cadáveres, y observando que eran cuerpos recién muertos, saltaron en tierra los indios y reconocieron que eran sus compañeros.

Y visto desde la playa, el mismo numeroso gentío podía compararse a un avispero, y la bandera roja a un trapo de los que los chicos cuelgan de una caña a fin de pescar ranas en las ciénagas. Para que la comitiva adquiriese unos asomos de solemnidad, fue preciso que entrase en los mezquinos arrabales del pueblo.

Nunca tuvimos un disgusto. Era lo más complaciente...; aquel abrigo ¿te gusta?; es una salida de baile que imita al capote del kronprinz en campaña...; muy bueno era Arturo. No le puedo olvidar, hijita. En balde trato de distraerme... aquel gorrito ¡qué mono! ¿no? es para la playa...; le tengo siempre presente, y no creo que pueda volver a querer a nadie como...

Sin la oportunidad maternal, me metía en un lindo barrizal pensó con una satisfacción que alivió un poco la amargura de sus pesares. Decididamente, mi señora madre tiene un olfato maravilloso y haré muy bien en seguir sus consejos más o menos directos. ¿Un buen matrimonio?... Encendió un cigarro y fue a asomarse a la ventana que daba a la playa.

Andando el tiempo, el río había depuesto su sedimento de riquezas sobre esta playa, pero muy poco del espíritu español, del Gobierno español. La actividad del comercio había traído el espíritu y las ideas generales de Europa; los buques que frecuentaban sus aguas traían libros de todas partes y noticia de todos los acontecimientos políticos del mundo.