Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 5 de junio de 2025


Carmen, a pesar del amor que profesaba a su marido, tenía movimientos de rebeldía. ¡Si ella hubiese sabido lo que era esta existencia antes de casarse!... En ciertos momentos, impulsada por la confraternidad del dolor, iba en busca de las mujeres de los toreros que figuraban en la cuadrilla de Juan, como si éstas pudieran darle noticias.

Pero Diana tenía razón; Juan no era el joven sociable y seductor que Alicia de Blandieres hubiera querido que le fuese presentado, a la noche, en el Casino. Alicia no habría mirado con buenos ojos a aquel caballero poco elegante, poco versado en la ciencia de las actitudes, e ignorante de la moda que rige, como soberana, los movimientos de los saludos y de los shakehands.

Pero la imparcialidad nos obliga a confesar que había perdido algo de su majestad característica. Por lo menos aquellos movimientos descompasados de hombros y cabeza eran inexcusables en un hombre tan elevado física y moralmente.

Las odontalgias y neuralgias de la quina son pulsativas y con calor; el dolor puede hacerse quemante; se forman tumefacciones en el sitio del dolor; en el mismo punto se verifican al menos, movimientos congestivos, con principalidad en las odontalgias y cefalalgias.

Las convulsiones producidas por el café se presentan con mas frecuencia en el período de escitacion, que en el de debilitacion, y son precedidas de pandiculaciones y seguidas de dolores quemantes y lancinantes, de movimientos congestivos en la cabeza; las convulsiones se agravan por la presion y por el ruido, ó por la aplicacion del calor esterior.

Todo lo que había comido era para él como si su estómago fuese una cesta ó una caja, y hubiera encerrado en ella mil manjares de cartón que ni se digerían, ni alimentaban, ni tenían peso, substancia ni gusto. Además, no se sentía dueño de sus movimientos, y tenía que andar con cierto compás difícil. Notaba en su cuerpo una gran dureza, como si todo él fuese hueso, madera ó barro.

que ven, saluda te digo y mi tía, al propio tiempo que le ordenaba a mi tío que saludase, hacía repetidos movimientos de cabeza en dirección al palco central, sin que fuesen notados por sus ocupantes. ¿Quiénes son, señora? preguntaba Fernanda.

Toda el alma de la niña estaba pendiente del ser querido que respiraba agitadamente a su lado, y sin equivocarse un punto, con la exactitud de un cronómetro, contaba los latidos de su corazón y observaba los movimientos de su pecho. Don Máximo y la señora de Ciudad cuchicheaban en la sala como si se estuviesen confesando.

Púsose a ello, ayudando al oficial de la prensa y máquina, y bien pronto conoció Bou que Mariano había escogido bien. Aprendió a manejar con habilidad el ácido y la grasa, y también sabía marcar con precisión. La máquina gustaba tanto a Pecado, que siempre que podía no se quitaba de alrededor de ella, atento a sus ordenados movimientos.

Observaba Orellana cuidadosamente sus movimientos, y certificado que no podia resistir al enemigo en la campaña, determinó defenderse dentro de la villa, y esperar en ella al enemigo.

Palabra del Dia

irrascible

Otros Mirando