United States or Kazakhstan ? Vote for the TOP Country of the Week !


De repente, y como para cerrar con broche de oro la jornada, el general Mendieta ordenó que las fuerzas del capitán Castillo, dando un rodeo, fueran á ocupar una posición situada á nuestra derecha, es decir, á la izquierda de los rebeldes, y precisamente hacia el sitio que estos intentaban ocupar.

Aquí mismo, en el ingenio "Unión", á medio kilómetro de esta sucursal de la Cafrería que se llama San Luis, se halla una fuerza americana de 150 hombres, con artillería, y sus tiendas de campaña y el humo de sus vivacs se distinguen con toda claridad desde los acantonamientos cubanos del general Mendieta.

Mendieta, que dijimos, fué dejado Del piloto mayor y marineros, Como era mozo mal considerado, Causò la muerte

Aquel poblado tan bello, tan poético, con sus casitas blancas, todas iguales, cubiertas de techos de zinc, limpias y resplandeciente, que tan agradable impresión me causara pocos días antes, al pasar por allí con la columna del General Mendieta, había desaparecido, y solo algunos montones de ruinas negras y humeantes, señalaban el sitio en que se alzó La Maya.

Acogido, pues, con gran entusiasmo el proyecto de regalar las banderas á la Milicia Nacional de Sevilla, se abrió la suscripción, en la que es cierto que sólo se admitían señoras, formándose una lista que fué encabezada por doña Josefa de O Denoju, hermana del jefe superior político, y por doña María de los Dolores Mendieta de Carvajal, esposa del poeta don Tomás José González Carvajal y madre del conde del Cazal, á quien todos recuerdan en Sevilla.

Después de las primeras escaramuzas de vanguardia, el general Mendieta efectuó un minucioso reconocimiento de las líneas contrarias, en el cual le acompañé, y me manifestó que las partidas que teníamos enfrente sumaban, en conjunto, unos mil y pico de hombres.

Llegó la hora del reconocimiento, y todos querían ir; pero el general Mendieta, que no se deja impresionar, no consintió en ello, autorizando á su ayudante el teniente Carrerá y al teniente veterinario Federico Cagigal, para que acompañasen á las fuerzas del capitán Castillo en el reconocimiento.

Es indudable, sin embargo, que, después del General en Jefe, la figura más saliente de la campaña de Oriente ha sido la del Brigadier Pablo Mendieta.

El campo está sembrado de cadáveres mutilados por las granadas de la artillería. Tan pronto como cesó el fuego, avanzó la columna hasta el batey del ingenio "Hatillo", donde el general Mendieta ordenó hacer alto para tomar el desayuno, que buena falta nos hacía.

También participaban de esas explosiones espontáneas de entusiasmo los oficiales, muchos de los cuales pedían permiso al general Mendieta para desalojar con la caballería á sus órdenes el campamento enemigo.