United States or Greenland ? Vote for the TOP Country of the Week !


Esta fué su gran cuestión durante algunos días, desde el en que palpó la necesidad de formalizar su antes vago propósito. Tremendas y muchas fueron sus cavilaciones con este motivo.

¡Quién sabe! me dije en conclusión de mis cavilaciones . Por puntos más obscuros ha amanecido otras veces; si está de Dios que ha de venir algo, ello vendrá. Todo es cuestión de paciencia y de saber conformarse. Conque un poco de filosofía, y a esperar lo que viniere.

Natural es que le sucediese lo que suelen experimentar todos los que tienen por costumbre penetrar el fondo de las cosas, que aun cuando han dejado la meditacion en que estaban embebidos, se les ocurre con frecuencia el punto en cuestion, como si viniese á llamar a la puerta, preguntando si le toca otra vez el turno.

Absolutamente, si lo amo... ¡Ah! insistís... Porque es la verdadera cuestión. No hay otra... y a mi vez quiero ser razonable. Os concedo que esta cuestión no esté completamente resuelta, y que quizá he procedido con demasiada ligereza. Ya veis cómo soy razonable.

Qué fuerzas forman, impulsan, guían la onda, es aún cuestión ardua; pero aquel avance mecánico de esa faja líquida que viene rodando en la llanura y que, al sentir la proximidad de la arena, gira sobre misma como un cilindro alrededor de un eje, es un fenómeno admirable. Al reventar, un mar de espuma se desprende de su cúspide y cae bullicioso y revuelto como el caudal de una catarata.

De aquí que muchos, con reprensible ligereza, hayan creído salir del paso negando que tal cuestión exista, y que realismo e idealismo sean escuelas verdaderamente antitéticas, puesto que todo productor de obras vivideras toma del natural sus elementos.

Los falsos delatores, dicen antiguas memorias que fueron castigados, sin que se especifique el castigo, que tal vez no fuera gran cosa, pues entonces los delitos de delación eran cuestión de poca monta para los inquisidores.

La titulada Ganar amigos, de Alarcón, es casi igual en mérito á la indicada: un poema sublime y apologético de la amistad, en el cual campean la inspiración poética más vigorosa y los más hidalgos sentimientos. Una noche, en que Don Fernando galantea á su novia en la ventana, se suscita una cuestión entre él y otro caballero, que termina con la muerte de éste.

La virtud era cuestión de arte, de habilidad. No sólo se conseguía por el ayuno, por el ascetismo; este era un medio muy santo, pero había otros.

Comprendió que el tener razón era allí lo de menos. A Ronzal ya le echaban chispas los ojos montaraces. Se había embrollado y esto era lo que más le irritaba siempre, perder el discurso a lo mejor. ¡, señor, esa cuestión; y quiero que se hable claro! Ni él mismo sabía lo que exigía. Foja se encargó de poner las cosas claras.