United States or Libya ? Vote for the TOP Country of the Week !
Don Carlos le permitía pasear sin compañía cuando subía al monte de los tomillares por la puerta del jardín; por allí no podía verla nadie, y al monte no se subía más que a buscar leña. Aquel día su paseo fue más largo que otras veces.
La cuesta era ardua, el camino como de cabras; pavorosos acantilados a la derecha caían a pico sobre el mar, que deshacía su cólera en espuma con bramidos que llegaban a lo alto como ruidos subterráneos. A la izquierda los tomillares acompañaban el camino hasta la cumbre, coronada por pinos entre cuyas ramas el viento imitaba como un eco la queja inextinguible del océano. Ana subía a paso largo.
A uno y otro lado los rayos rastreros del sol hacían brillar los tomillares cubiertos de rocío. Volvió el rostro. La ciudad le llamaba con una voz de tedio, de perfidia, y la fiera muralla, toda roja en el amanecer, hízole pensar en el encarnado capucho del verdugo. Volver era morir, morir cubierto de pecados, perder el alma para la eternidad. Al llegar a la primera encrucijada se detuvo.
Palabra del Dia
Otros Mirando