United States or Tajikistan ? Vote for the TOP Country of the Week !


Debe haber un daltonismo hereditario en la masa. Es imposible que vean el rojo con el mismo tinte que se nos ofrece. El verde los seduce; es necesario haber vivido un año entre cotorras para habituarse a aquellos plastrons imposibles. En cambio, el grupo de los swell se viste con una elegancia sólo comparable a la alta clase inglesa.

¿El amor? le interrumpió vehementemente Melchor, y riéndose al mismo tiempo que hablaba, le dijo: ¿el amor?... ¡qué gracioso!... ¿el amor?... ¡daltonismo puro! Va a ser la una dijo Lorenzo mirando su reloj, me está dando sueño. Es la digestión. ¡No, señor! interrumpió Melchor.

Pero a no me sirven de gran cosa tus cristales... ¡Qué! ¿Eres daltónico? Tal vez... ¡, hombre! y ... ¡los dos! ¡Al fin encontré la fórmula de mi diagnóstico!... ¡Daltonismo moral!... exclamó Melchor, riendo con toda su risa franca y contagiosa. ¿Y usted considera, señor médico le preguntó Lorenzo, en tono por excepción solemne y bromista al par que nuestro «mal» sea curable?

Lo garantizo, como dicen ahora los que se las dan de puristas, y lo garantizo porque han de saber ustedes que ustedes también tienen la colección de cristales que yo tengo. ¿Nosotros? ¡, señor... ustedes! y agregó ahuecando la voz: Para el daltonismo moral, la imaginación tiene colores complementarios. Quizá no dices un disparate dijo Lorenzo.