Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 26 de mayo de 2025


Isidora le observó con tanta lástima como sorpresa, diciendo: «¡Padrino...!». Relimpio la miró como se mira una visión celeste, y poniendo los ojos en blanco, todo suspenso y como transportado a una esfera ideal por el delirio de la inspiración poética, murmuró con arrullo estas palabras: «¡Hurí, hurí..., nadie osará ya mancillar tu blancura!

D. Álvaro de Sande no sale tan bien librado como en las relaciones impresas, en ésta, que deja suspenso y conmovido el ánimo del lector. Sacada del italiano en español. Forma un códice en 4.º de 61 fojas, escritas por tres manos distintas, por cuadernillos, por la urgencia con que se tendría que sacar la copia. La hoja primera de guarda dice: La jornada de Berbería de 1560 y 1561.

Permaneció unos instantes suspenso; pero, ante la mirada fija, imperiosa del Duque, bajó la cabeza y se dispuso a cumplimentar la orden. Llamó al perro, le ató con una cadena, y tomando la carabina, salió de casa. ¡Qué ajeno iba el pobre animal de que le llevaban al suplicio!

Llegó el cuadrillero, y, como los halló hablando en tan sosegada conversación, quedó suspenso. Bien es verdad que aún don Quijote se estaba boca arriba, sin poderse menear, de puro molido y emplastado. Llegóse a él el cuadrillero y díjole: -Pues, ¿cómo va, buen hombre?

Así es que cuando no hablo yo de mis miras, de mi vocación, de mis estudios, lo cual embelesa en extremo al señor vicario y le trae suspenso de mis labios, cuando es él quien habla y yo quien escucho, la conversación, después de mil vueltas y rodeos, viene a parar siempre en hablar de Pepita Jiménez. Y al cabo, ¿de quién me ha de hablar el señor vicario?

Andrés lo advertía con disgusto, porque deseaba tomase sus palabras en serio. Yo te quiero mucho, Rosa; más de lo que piensas... Y ¿para qué me quiere usted? preguntó volviendo hacia él su rostro y mirándole fijamente. Andrés quedó un instante suspenso. Te quiero... yo no por qué te quiero... No lo puedo remediar.

Cuando no podemos desahogar el alma de las cosas confusas y sin nombre que en ella laten, a través de los ojos de la carne, inundados de lágrimas, los ojos del espíritu se levantan al cielo, al gran misterio, y allí quedan posados en muda contemplación, suspenso el tiempo, suspensa la vida misma.

El portavoz de los torreros me llamaba para comer a las cinco, y a esa hora, por un senderito escarpado a pico entre los matorrales, suspenso encima del mar, encaminábame lentamente al faro, volviendo a cada momento la vista hacia aquel inmenso horizonte de agua y de luz, que parecía ensancharse conforme ascendía yo. El espectáculo era encantador desde la cima.

»Cuando hablaba en el Tribunal Supremo y en el Consejo de Estado, a las primeras palabras quedaban como en suspenso los magistrados, y don Carlos Bonet, fiscal del Supremo, me decía: «¿Qué demonios tienes, que esta gente, que ya está empachada de informes, cuando hablas parecen unos memos oyéndote

A todo callaba Andrés, suspenso e imaginativo, y no acababa de caer en la traición de la Carducha.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando