Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 22 de mayo de 2025


Saludaron éstos a los contrarios y al médico, que debía servir para los dos contendientes según se había convenido: Miguel y el periodista moderado se hicieron de lejos una leve inclinación de cabeza.

No podía consentir que Herr Desnoyers, pariente de un von Hartrott al que recordaba vagamente haber visto en la corte , viviese en la habitación de los porteros. Debía ocupar su dormitorio, aquella cama solemne como un catafalco, con penachos y columnas, que había tenido el honor de servir horas antes á un ilustre general del Imperio. Yo prefiero dormir aquí.

Guárdese pues todo, con la debida separacion; que si lo apócrifo no sirve para fundar derechos ni defenderlos, puede servir para la historia del mismo archivo, lo que no es de poca importancia para distinguir lo apócrifo de lo auténtico.

Silas la oprimió contra su corazón, y profirió casi inconscientemente voces cariñosas para calmarla. Al mismo tiempo le ocurrió que una parte de su sopa, que se había enfriado junto al fuego moribundo, podría servir de alimento a la criatura, con tal que hiciera calentarla un poco. Tuvo mucho que hacer durante la hora siguiente.

Semejante posición no era en aquella época humillante, porque españoles nobles y principales no se desdeñaban de servir á Papas y Cardenales, arrastrados por el deseo de ver el mundo, por la protección que en ellos encontraban, y por la perspectiva de obtener pingües beneficios, que los reconciliaban con su estado.

Este amor ha hecho que, por servir noble y dignamente siempre á su majestad, que de otro modo no le sirviera yo, haya salido muchas veces sola de noche, yo que no he estado nunca sola, ni aun en mi casa.

Doña Violante se ha puesto en camino en este intervalo para buscar á su infiel amante, y para expiarlo mejor, ha entrado á servir en Vallecas, pueblo inmediato á Madrid, á un labrador que se dedica á hacer pan, que ella ha de vender diariamente en la capital.

Rafael Alcántara, que ya había pellizcado en todos los platos de entremeses, volvió a gritar: Señores, que venga por Dios esa cena, porque voy a pillar una indigestión de aceitunas. Acomodáronse todos, al fin. Dos mozos comenzaron a servir los platos.

Al medio-dia de este promontorio entra un brazo del Océano occidental, formando una bahia, y terminando en lagunas. No se sabe si esta laguna, ó bahia puedo servir para estancia de navios, respecto de que jamas se ha sondeado, no atreviéndose á llegar allí los navios por miedo de los bancos, que llaman Arenas Gordas.

Ella hace lo que él le dice, y después saca del bolsillo el fino pañuelo de batista que ha llevado al baile. No puede servir de mucho dice Juan, y con mano temblorosa coge su grueso pañuelo. Déjame secarte el pie.

Palabra del Dia

bagani

Otros Mirando