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Actualizado: 11 de junio de 2025


En el ambiente flotan hálitos de vidas remotas, cadencias de músicas antiguas, y como un fantasma de sonido, susurros de voces lejanas que tiemblan en el aire con quimérica, muda vibración. Algo espectral y desvanecido que da una vaga y misteriosa sensación de presencia.

Si hubiera podido penetrar en la mente del buen señor, hubiera quedado asombrada, pues no hubiese hallado ninguno de los pensamientos amenazadores que le atribuía. Roussel no pensaba sino en regocijarse, en gozar de la hora presente y en tratar de que se arreglase el porvenir de un modo soportable. La astucia que Clementina le imputaba como un crimen, era supuesta, ilusoria y quimérica.

La señora de Bray se había impuesto la tarea de casarlo: quimérica empresa, pues nada era más difícil que llevarle a discutir razonablemente sobre tales ideas. Su respuesta ordinaria era que ya había pasado la edad en que uno se casa por inclinación, y que el matrimonio, como todos los actos capitales y peligrosos de la vida, reclama un gran impulso de entusiasmo.

Iban vestidos de la garganta á los pies con un traje muy ceñido y cubierto de escamas de plata. Su casquete, del mismo metal, estaba rematado por un ave quimérica. Apoyaban la mano izquierda en la empuñadura de su espada, mirando á todas partes con una insolencia de vencedores, ó se inclinaban galantemente ante las familias de los altos personajes que iban llegando para la ceremonia.

Así se expresaban los que tenían interés en que continuase en la tierra todo lo mismo, á la sombra protectora de las creencias. ¿Cómo no habían de indignarse los infelices contra una religión que les cerraba el camino de la justicia y el bienestar aquí abajo, para no darles más que la quimérica esperanza de una justicia divina que los ricos pueden sobornar con dádivas á los sacerdotes?

¡No, verdaderamente, es inicuo!... Se me deja crecer con una esperanza quimérica y comprometer, acaso, mi porvenir, y, de la noche a la mañana, todo se viene abajo como un castillo de naipes y se me deja reducido a una medianía que no es siquiera dorada. Impotente para devorar su amarga decepción, pisoteaba rabiosamente la estera de China que cubría el suelo.

Palabra del Dia

rigoleto

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