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De elevada estatura y bien desarrollada, hubiera representado más de diez y ocho años, si su boca, a pesar de un arco algo desdeñoso que amenazaba acentuarse con el correr del tiempo, no hubiese tenido movimientos infantiles. Su porte y su gesto eran acompasados y algo al descuido, aunque armoniosos sin rebuscamiento.

La chalupa, en efecto, se dirigía hacia la luz misteriosa, que se extendía de Norte a Sur en un espacio amplísimo. Sufría esa luz grandes oscilaciones y movimientos: unas veces parecía alzarse, otras bajarse; destacábanse a veces de ella múltiples puntas o crestas, y se rodeaba de una niebla brillante que vibraba con violencia.

Aseguraremos pues que el papel es el mismo, porque ha habido continuidad de sensacion, ó bien enlace de las sensaciones de los diferentes colores, con una tercera, que es la que resulta de la situacion del papel, de sus movimientos, y de cuanto nos sirve para conocer lo que es comun á lo segundo, y á lo primero.

Ríñeme, por mala... Te juro que no lo haré más. Contendré mis nervios; procuraré no dejarme llevar por ellos, aunque reviente. Volvió a dormirse muy entrada ya la noche. El silencio era absoluto. Fuera de la casa, ni un ruido de pasos, ni una voz: la nieve pesaba sobre la vida, ahogando sus movimientos. Helaba.

Para llevar la conviccion hasta el último punto atengámonos al mismo ejemplo del movimiento; supongamos movido un cubo, y llamemos á sus ocho vértices A. B. C. D. E. F. G. H; todos se mueven; y el conjunto de sus movimientos, así como de los puntos que están entre ellos, forma el movimiento total.

Nada más fácil que a esa hora los marineros de mi falúa se empeñen en llevarnos al Moral, y como ustedes comprenden no sería cortés el desairarlos. La tertulia deploró esta determinación que la privaba de sacrificarse por la fraternidad universal, con risa inextinguible, voces y movimientos desordenados: «¡Qué don Mariano éste! ¡Siempre ha de tener esas bromas!

Así como se hallaron sobre el entarimado y cerradas convenientemente las trampas, dieron comienzo, como es lógico, a una danza fantástica; pues bien sabido es de antiguo que no pueden estar juntos cuatro demonios sin entregarse con furor al baile. Los espectadores seguían con extremada curiosidad sus vivos y acompasados movimientos. Un chiquillo lloró. El público obligó a su madre a que lo sacase.

Advertíase, no obstante, cierta agitación en aquella alegría. Sus movimientos eran demasiado vivos y resueltos, como si tratase de ocultar el leve temblor de sus manos y el estremecimiento que corría por todo su cuerpo. ¿Era un estremecimiento de placer? ¡Oh, , María sentía un inmenso placer!

De vez en cuando sacan el fino pañuelo de batista, y con una delicadeza que les honra se dedican largo rato a frotarla mientras su espíritu reposa dulcemente abstraído de todo pensamiento terrenal. Graves, solemnes, armoniosos en sus movimientos, los socios más distinguidos del Club de los Salvajes chupan y soplan el humo del tabaco de dos a cuatro de la tarde.

Ahora bien, el único mérito de aquellos días de puro fastidio era el grado de más o de menos en los movimientos de vida que sentía en .