Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 5 de junio de 2025
Granada misma, comparada con la Granada histórica moruna, es un testimonio elocuente en favor de la doctrina de la justicia, la tolerancia y el progreso.
El bandido le estaría mirando tal vez por algún agujero; tal vez preparaba su escopeta para dispararla traidoramente desde uno de los ventanillos altos; ó instintivamente, con esa previsión moruna atenta á suponer en el enemigo toda clase de malas artes, resguardó su cuerpo con el tronco de una higuera gigantesca que sombreaba la barraca de Pimentó.
Juanito viose detenido por la masa apiñada ante el tablado de los bailes populares. Sonaba el agudo cornetín repitiendo monótonamente la contradanza moruna o acompañando las voces de los cantadores, y a su compás saltaban sobre el tablado las parejas de bailarines, que de lejos parecían polichinelas. En aquel lugar bifurcábase la corriente del gentío.
Eran los picadores, rudos jinetes de aspecto montaraz, llevando encogido a la grupa, tras la alta silla moruna, una especie de diablo vestido de rojo, el «mono sabio», el servidor que había conducido la cabalgadura hasta su casa.
Y todo ese conjunto informe, semejante á un inmenso monton de peñascos despedazados, dominado por algunas cúpulas moriscas, por una infinidad de azoteas y miradores irregulares, enclavados sobre hileras de ventanillas y troneras y de lienzos de muros dentellados. Al derredor de lo que fué la Valencia moruna está la Valencia española y los arrabales.
La base fué la gran mezquita, y como encima le aglomeraron obras góticas y del Renacimiento, resultó una jerigonza de arquitectura, original y especialísima en la España moruna.
Sin embargo, íbamos casi solos..... Los españoles tenemos pocos asuntos fuera de casa, y los que tenemos no nos interesan hasta el extremo de hacernos emprender largos viajes. Nuestra filosofía moruna, ascética, ó como queráis llamarla, da de sí esta magnánima indiferencia, tan deplorada por economistas y políticos, y tan aplaudida por otra clase de pensadores que miran las cosas desde más alto.
Seré muy buena; te querré mucho... Me tomas como una amante; pero con bondad y con cariño, yo he de conseguir que me adores como a esposa. Venganza moruna Casi todos los que ocupaban aquel vagón de tercera conocían a Marieta, una buena moza vestida de luto, que, con un niño de pechos en el regazo, estaba junto a una ventanilla, rehuyendo las miradas y la conversación de sus vecinas.
Era inevitable de vez en cuando la cólera del río: hasta había que agradecerla, pues constituía diversión inesperada; una agradable paralización de trabajo. La confianza moruna daba tranquilidad a la gente.
Mientras estas buenas gentes recordaban emocionadas mi hospedaje en su vivienda, fueron sacando todos los objetos que yo había dejado olvidados. Así recobré el cuento Venganza moruna, volviendo á leerlo aquella noche, con el mismo interés que si lo hubiese escrito otro. Mi primera intención fué enviarlo á El Liberal de Madrid, en el que colaboraba yo casi todas las semanas, publicando un cuento.
Palabra del Dia
Otros Mirando