Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 22 de junio de 2025
15 a hacer juicio sobre todos, y a convencer a todos los impíos de entre ellos de todas sus malas obras que han hecho infielmente, y de todas las palabras duras que los pecadores infieles han hablado contra él. 16 Estos son murmuradores, querellosos, andando según sus deseos; y su boca habla cosas soberbias, teniendo en admiración las personas por causa del provecho.
Suponga usted también que ella se arrepiente de su mala conducta, que recibe de Dios aflicciones y justas calamidades, que se pudre en vida, que se retira a hacer vida claustral, que luego cae en poder de infieles, que la martirizan, que la queman, que la achicharran, que muere, que se salva, que es santa, que es pura como un ángel.... Bueno, suponga usted que nos encontramos en el cielo....
Pidió, pues, con instancia á D. Felipe la asistencia contra los infieles, enviando por embajador á la corte al Comendador Guimarán.
Una tribu de montañeses infieles del interior de Mindanao, cuya comarca no me es conocida con exactitud, se llama mananap ó mananapes en su forma española. En lengua de los bagobos, mananap significa, «bestia, animal» con lo cual se explica el concepto que de tales vecinos tienen los que en la misma isla se llaman manobos, voz que en bagobo significa «hombre».
Hemos interrogado á varios contemporaneos del P. Morillo, y todos los datos que nos ha sido posible adquirir acerca de su persona se reducen á los siguientes. Nació en el reino de Andalucia, y vistió temprano el hábito de los Recoletos. Movido del deseo de emplearse en la conversion de los infieles, pasó á América, donde llegó á ser prelado de su órden en la provincia de Salta.
Si obráis milagros para sanar á los infieles, ¿por qué no haréis lo mismo con los cristianos?
Señaló, pues, el P. Provincial para entrar por lo boca del río Pilcomayo á los PP. Gabriel Patiño y Lucas Rodríguez, ambos nacidos en la ciudad de la Asunción, y á la sazón Misioneros de los Guaranís; y del colegio del Paraguay despachó al hermano Bartolomé de Niebla, andaluz, y á un donado portugués llamado Faustino Correa, con algunos indios Guaranís, para que si fuese necesario defendiesen á los Padres de las invasiones de los infieles.
Repetí el llamamiento; el mismo silencio. Entonces entro. ¡Ah, señores! no me sentí orgulloso. Habría querido escabullirme, saltar dentro del coche y gritar «¡A la estación!» Tomar el primer tren y huir a América, a cualquier parte, allá donde se refugian los cajeros infieles y los hijos pródigos. Pero era imposible. ¡Yolanda! dije en tono humilde y contrito. Las dos lanzan un grito.
Está, en fin, dicha bahía, por sus inmejorables condiciones, llamada á figurar entre los primeros puertos del Archipiélago. Pueblan sus tierras diferentes razas de infieles, que son tagacaolos, mandayas y algunos moros. Todos, aunque no sometidos, son pacíficos, y cambian los productos que recogen en los montes donde viven por efectos diversos para sus trajes y adornos.
Mas en lo que sobre todo se hizo admirable entre los nuestros fué en el celo de las almas y en la conversión de los infieles.
Palabra del Dia
Otros Mirando