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Actualizado: 23 de mayo de 2025
El vencedor se echa sobre él y canta en señal de victoria, no siendo extraño que el herido se levante y se vuelva contra su enemigo, y si este huye, como sucede algunas veces, pierde y es condenado á ignominiosa muerte, desplumándole y colgándole de esta suerte fuera de la gallera.
Respecto á su origen se dieron varias explicaciones, todas las cuales fueron simplemente conjeturas. Algunos afirmaban que el Reverendo Sr. Dimmesdale, el mismo día en que Ester Prynne llevó por vez primera su divisa ignominiosa, había comenzado una serie de penitencias, que después continuó de diversos modos, imponiéndose él mismo una horrible tortura corporal.
De este modo será una especie de sermón viviente contra el pecado, hasta que la letra ignominiosa se grabe en la losa de su sepulcro. Me duele, sin embargo, que el compañero de su iniquidad no estuviera, por lo menos, á su lado sobre ese cadalso. Pero ¡ya se sabrá quién es! ¡ya se sabrá quién es!
Comprendiendo el estado del espíritu de la pobre culpable, el ministro de más edad, que se había preparado para el caso, dirigió á la multitud un discurso acerca del pecado en todas sus ramificaciones, aludiendo con frecuencia á la letra ignominiosa.
El criado, cumplidor de la ignominiosa orden, era un segundo mayordomo llamado Román, que desde su niñez servía en la casa. Desde que le conocí en El Escorial, aquel hombre me había inspirado inexplicable antipatía, y digo esto y además le nombro, para que mis lectores le tengan presente, por si figurase después un poco en los peregrinos sucesos de esta historia.
Los que llegan á desembarazarse del enredo, y á ver claro en el negocio, ó callan, ó se hallan impugnados por mil y mil á quienes importa sostener la ilusion; y la mancha que cae sobre los embaucadores nunca es tan ignominiosa que no consienta algun disfraz.
Se aferra á un sistema, allí se encastilla con todas las razones que pueden favorecerle; su ánimo se va acalorando á medida que se ve atacado; hasta que al fin, sea cual fuere el número y la fuerza de los adversarios, parece que se dice á sí mismo: «este es tu puesto; es preciso defenderle: vale mas morir con gloria que vivir con ignominiosa cobardía.»
Palabra del Dia
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