Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 16 de julio de 2025
Hasta agora no he tocado derecho ni llevado cohecho, y no puedo pensar en qué va esto; porque aquí me han dicho que los gobernadores que a esta ínsula suelen venir, antes de entrar en ella, o les han dado o les han prestado los del pueblo muchos dineros, y que ésta es ordinaria usanza en los demás que van a gobiernos, no solamente en éste.
El segundo inconveniente es: que estos padres con singular artificio dan á entender al mundo la intrínseca amistad que tienen con los príncipes, pintándola aun mayor de lo que ella es en efecto, con fin de que todos sus ministros sean sus amigos, y de que todos acudan por favor á sus pretensiones, y así se han alabado públicamente en Roma de poder hacer cardenales, nuncios, tenientes gobernadores y otros oficios; y han dicho algunos afirmativamente que puede mas su general que el Sumo Pontífice; otros han dicho que es mejor ser de aquella religion que puede hacer cardenales, que ser cardenal, y todas estas cosas se han hecho públicamente; de manera que no hay persona que familiarmente trate con estos padres, á quien no hayan dicho estas ó cosas semejantes.
Ayudado en mis investigaciones por los curas y gobernadores, creo poder presentar como evidentes los datos que siguen; pues los he tomado con toda exactitud de los registros de cada parroquia.
Al gobernador de los pueblos le ponen en la iglesia silla, tapete y almohada, y se le guardan por los curas todas las preeminencias que disponen las leyes se guarden a los gobernadores los días de funciones clásicas, y en que asisten religiosos de otros pueblos.
Una contradanza de gobernadores y una hornada de altos funcionarios se habían hecho indispensables en aquellos días; y como las vacantes eran menos que los diputados ministeriales, hubo entre éstos disgustos, discordias y desavenencias, ya por razón de despecho, ya por razón de estómago; cundió la indisciplina, y de la noche a la mañana se halló el Gobierno en grave riesgo de perder la mitad de sus huestes.
Que cosa dicho navio haya traido á los gobernadores de estas provincias, acerca de este iniquísimo tratado, no se sabe; pero es cierto haberse entonces convenido por entrambas partes en la isla de Martin Garcia; aunque mucho antes estaba destinada para esto, y haberse allí acordado, que á 15 de Julio el ejército español hostilizase, sugetase y obligase á obedecer los mandatos al pueblo de San Nicolas, y el Portugues, al de San Angel.
Marchaban formados en cuatro líneas sencillas y no apretadas, formando un cuadro, en cuyo centro iba una innumerable porcion de caballos, bueyes, carretas, y los bagages de los Gobernadores, y tambien de los capitanes, con órden. Muy cuidadosos estuvieron en preguntar á los cinco exploradores, si por ventura algunos PP. Jesuitas estaban en el ejército de los indios, y de qué número se componia?
-Yo no te entiendo, Sancho -dijo Ricote-, pero paréceme que todo lo que dices es disparate; que, ¿quién te había de dar a ti ínsulas que gobernases? ¿Faltaban hombres en el mundo más hábiles para gobernadores que tú eres?
Los primeros gobernadores, elegidos entre los capitanes de la real armada, ensayaron todavía algunas mejoras.
Los aventureros de espíritu caballeresco, afligidos por los abusos de los gobernadores, ejercían la justicia por su mano, lo mismo que el hidalgo manchego.
Palabra del Dia
Otros Mirando