Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 25 de mayo de 2025
12 Vino, pues, Jeroboam con todo el pueblo a Roboam al tercer día; según el rey les había mandado diciendo: Volved a mí de aquí a tres días. 14 y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, y yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, y yo con escorpiones.
Volved y decilde que me rio de su mocedad, y que se venga él y los suyos que consigo tiene, y si no lo quiere hacer, que me pesa, porques mi hijo y quiera morir desa manera." El mensajero le respondió á estas palabras que le decia Viracocha Inca, que su señor tenia presupuesto aquello, y que en ninguna manera dejaba de morir ó vencer él y los que con él estaban ántes que venir en subjecion.
12 Y al tercer día vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam; según el rey lo había mandado, diciendo: Volved a mí al tercer día. 14 y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os hirió con azotes, mas yo os heriré con escorpiones.
Sandoval que ya estaba alegre se puso á cantar: ¡Un fraile, dos frailes, tres frailes en el coooro Hacen el mismo efecto que un solo tooooro! Escuchad, hermanos; volved la vista hácia los hermosos días de vuestra infancia; tratad de examinar el presente y preguntaos el porvenir. ¿Qué teneis? ¡Frailes, frailes y frailes!
Finalmente, volvieron al carro, y, en llegando, dijo don Quijote al carretero: -Volved, hermano, a uncir vuestras mulas y a proseguir vuestro viaje; y tú, Sancho, dale dos escudos de oro, para él y para el leonero, en recompensa de lo que por mí se han detenido.
No sé qué contestaros; no sé qué deciros... Yo sí, yo sé lo que os tengo que decir... ¡os amo! ¡os amo! más que ayer, más á cada momento; ¡os amo! ¡muero por vos! ¡pero idos! volved tranquilo á vuestra casa... yo os avisaré... y nos veremos. Don Juan hizo un esfuerzo y salió.
Cuando hubo abierto la puerta de la sala, la condesa le dijo con un tono y una expresión en que estallaba la alegría: Marta, acompañad a la señorita a su cuarto; cerrad cuidadosamente las puertas y volved pronto; tengo que hablaros de un asunto importante.
He visto en mi camino a la muerte y están marcadas mis horas... Cuando echéis el cuerpo a la tierra, volved a poner la losa que han alzado mis manos, pero antes no. ¡Maldito sea quien lo intente!... Tú, mal hijo, no finjas dolor... Lleva a los otros la noticia, y celebradla juntos en la cueva de los ladrones, en el cubil de un lobo, donde nadie os vea.
Padecéis un fuerte ataque de coriza, y habláis por la nariz: por eso os expresáis en auvernés. Esto es muy lógico. Volved a vuestra casa, aspirad bastante acónito, conservad los pies calientes y la cabeza abrigada y, en lo sucesivo, adoptad toda clase de precauciones contra los constipados, pues ya sabéis cuáles han de ser para vos sus consecuencias.
Apenas salió, cuando Sancho dijo al ganadero, que ya se le saltaban las lágrimas, y los ojos y el corazón se iban tras su bolsa: -Buen hombre, id tras aquella mujer y quitadle la bolsa, aunque no quiera, y volved aquí con ella. Y no lo dijo a tonto ni a sordo, porque luego partió como un rayo y fue a lo que se le mandaba.
Palabra del Dia
Otros Mirando