Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 18 de junio de 2025
Y si bien recordó a D. Quijote, cuando vencido por el caballero de la Blanca Luna decidió hacerse pastor, maldito el efecto que le hizo la burla, sino que pensó en renovar con Pepita Jiménez, en nuestra edad prosaica y descreída, la edad venturosa y el piadosísimo ejemplo de Filemón y de Baucis, tejiendo un dechado de vida patriarcal en aquellos campos amenos; fundando en el lugar que le vio nacer un hogar doméstico lleno de religión, que fuese a la vez asilo de menesterosos, centro de cultura y de amistosa convivencia, y limpio espejo donde pudieran mirarse las familias; y uniendo por último el amor conyugal con el amor de Dios, para que Dios santificase y visitase la morada de ellos, haciéndola como templo, donde los dos fuesen ministros y sacerdotes, hasta que dispusiese el cielo llevárselos juntos a mejor vida.
En los tiempos del prudente y piadosísimo Felipe II, no hubo auto de fe que achicharrara maldecidos y perniciosos herejes a que no asistiera cerca del monarca un Tumbaga. Y mientras Felipe III ocupó el trono, para mayor gloria de nuestro nombre y terror de nuestros enemigos, otro Tumbaga ilustró su apellido sirviendo los amorosos caprichos de Uceda, que era entonces como servir al Rey mismo.
Y como en aquel tiempo se trataba con gran calor de la conversión á nuestra Santa Fé de las naciones que están hacia el estrecho de Magallanes, que descubiertas pocos años antes por el V. P. Nicolás Mascardi, italiano, sujeto de la provincia de Chile y mártir del Señor, pedían predicadores de nuestra Santa Ley, y por orden de nuestro piadosísimo Monarca Carlos II, estaban ya á punto algunos fervorosos misioneros para entrar en las tierras de los Patagones, fué también señalado el P. Arce.
La tercera Reducción se puso debajo del patrocinio del señor San Joseph, á instancias del piadosísimo señor marqués de Toxo, D. Juan Joseph Campero, insigne bienhechor de esta cristiandad, y se fabricó sobre un monte, por cuya falda corre un riachuelo que fecunda un gran espacio de tierra llana; fundáronla los Padres Felipe Suárez y Dionisio de Avila, que por gran tiempo fueron inseparables compañeros en sus trabajos y sudores, no teniendo muchas veces con qué acallar el hambre y reparar el cuerpo en tantas y tan largas fatigas; y así, para que oprimidos de las incomodidades no diesen con la carga en tierra, les vino no mucho después á ayudar el P. Antonio Fideli.
Palabra del Dia
Otros Mirando