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Actualizado: 22 de mayo de 2025
Si todos estos eminentes riesgos, que no son imaginarios sino casi ciertos y consiguientes al próximo en que estamos al presente, de que apostaten los indios de los 7 pueblos y aún de los 30, se hiciesen presentes al Rey nuestro señor y al fidelísimo de Portugal, con la ingenuidad y verdad con que ya los estamos tocando, se podrá creer de su católico y fidelísimo celo que es su ánimo y voluntad se atropelle la gloria de Dios y respeto de la Iglesia por cumplimiento de los tratados ya ajustados?
Entonces se retiran por decirlo así las fronteras del universo; pues por grande que este sea, en llegando á un límite, nos ofrece una extension particular, nó la misma extension. Hé aquí como parece que se engendra en nosotros la idea de los espacios imaginarios.
En estos pueblos las mujeres son casi hombres: hombres afectuosos, imaginarios, tiernos: hombres como pueden serlo una madre y una hija, porque la naturaleza no puede mentir; pero personalidades humanas, verdaderos poderes en la familia, en la opinion, en el derecho, en las creaciones sociales; personas de razon, porque la educacion no puede dejar de enaltecer, libertando al esclavo; porque la libertad es la sancion divina del albedrío; porque el albedrío es la sancion divina del hombre; porque el hombre es la sancion divina de la sociedad; la libertad es el mismo Dios que se filtró en nuestra conciencia: sed semejantes á mí, quiere decir sed libres. «Si no sois libres, nos dice Dios, ¿con qué virtud me vais á amar?»
Pronto, igualmente, mi antigua ciudad nativa se me presentará al través de la bruma de los recuerdos que la envolverá por todas partes, como si no fuera una porción de este mundo real y positivo, sino una gran aldea allá en una región nebulosa, con habitantes imaginarios que pueblan sus casas de madera, y pasean por sus feas callejuelas y su calle principal tan uniforme y poco pintoresca.
Si la salvación depende de no comer jamón o de no beber alcohol, o de beber tres gotas diarias de orines de vaca sagrada, o de no comer vaca profana en día viernes, son asuntos que están fuera de la ciencia positiva, porque los problemas imaginarios sólo pueden ser planteados y resueltos por las ciencias imaginarias.
Todos los dias se estan publicando obras en que se enmiendan errores, verdaderos ó imaginarios; pero lo cierto es que en muchos puntos gravísimos hay una completa discordancia en las opiniones. Esto no debe conducir al escepticismo, pero sí inspirar mucha cautela. La autoridad humana es una condicion indispensable para el individuo y la sociedad: pero es preciso no fiarse demasiado en ella.
Y treinta y dos generaciones de hombres transcurrieron bajo la era cristiana en la miseria, la ignorancia y la barbarie crónicas, profiriendo u oyendo solamente la palabra sagrada, fulminada desde el púlpito, volcán de amenazas, en erupción perpetua de castigos en este mundo y en el otro, para los pecadores y los infieles, en fuente inagotable de terrores imaginarios para implantar en el corazón de los elegidos para el cielo el horror a la vida irrenunciable y el temor a la muerte inevitable.
Cuando á mas de ser hay no ser, y se percibe esta relacion, el tiempo comienza; concebir pasado y futuro sin la alternativa de ser y no ser, como una especie de línea que se prolonga hasta lo infinito en dos direcciones opuestas, es tomar por idea filosófica un vano juego de la fantasía, es aplicar al tiempo la ilusion de los espacios imaginarios.
Pero por más que en mi mente pasaba revista a todos los héroes de novela que conocía, no hallaba ninguno que fuese tan rochonchito como mi nuevo héroe. Era gordo, no había la menor duda, pero tan bueno, tan alegre, tan gracioso, que pronto este defecto físico se transformó a mi vista en una cualidad trascendental. Hasta no tardaron en parecerme desprovistos de atractivos mis imaginarios héroes.
El barón permaneció algún tiempo cabizbajo; Froilán y Roger no iban menos silenciosos y pensativos que él, pero el alegre Gualtero, que no tenía penas ni amores, se entretenía en blandir la pesada lanza de su señor, amenazando con ella á los árboles y dirigiendo grandes botes á imaginarios enemigos, aunque cuidando mucho de que el barón no advirtiese su belicosa pantomima.
Palabra del Dia
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