Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 23 de junio de 2025


A Juan Bautista 20 ducados por la danza de «El triunfo de David» con 9 figuras. «A ples ¿autapel? 3567 mrs. por 87 varas de anjeo que dió para el carro que se hace de los italianos á 41 mrs. la vara lo qual se libró por cédula del señor juan de león, veyntiquatro á quien fué cometido el hacer el dho. carro ... etc.

Los grupos de campesinos bebían el último trago con los del pueblo, antes de emprender la marcha, deseosos de relatar los incidentes de la famosa lucha durante la velada en la casería. En la plaza sonaban el pito y el tamboril con cadencias de baile. Se había reunido toda la gente joven para celebrar la victoria con un aurresku, la gran danza vasca que tenía algo de rito primitivo.

Todo fue tan instantáneo que la Princesa apenas tuvo tiempo de ver al pájaro, pero su atrevimiento y su hermosura le causaron la más extraña impresión. Pocos días después, la Princesa, para distraer sus melancolías, tejía una danza con sus doncellas, en presencia de los Príncipes. Estaban todos en los jardines y la miraban embelesados.

Doña Teresa Burguillos, feliz consorte del barbero, era un poco torpe para la pronunciación de los nombres propios, y solía llamar Aldaba al amigo y comilitón de su esposo. Era Curro Aldama ó Aldaba exaltado fontanista, de crasa ignorancia, y con aquella osadía que acompaña siempre á los necios. Se la echaba de gran patriota, y no sonaba cencerro en Madrid sin que él tomara parte en la danza.

Si los hombres no usáramos bolsillos, no habría entre nosotros egoísmo, no habría ambición, no habría tuyo y mío, no habría propiedad, no habría tiranía... Seríamos como unos osos de diferente especie, serios y dignos, aunque aficionados a la danza.

El conde interrumpió su conversación en alemán para hablar á Desnoyers, que parecía interesado por el estrépito. Es el cañón. Se ha entablado una batalla. Pronto entraremos en danza. La posibilidad de tener que abandonar su alojamiento, el más cómodo que había encontrado en toda su campaña, le puso de mal humor. ¡La guerra! continuó . Una vida gloriosa, pero sucia y embrutecedora.

Y recordaba cierto aurresku bailado por don Carlos en Durango, en un convento de monjas, sin pecado para nadie, por ser la danza vascongada la más honesta del mundo.

Se colocaron los bancos en rueda, destinado el frente que daba al rancho sitio de honor para los guitarreros, para las mamás y para los mosqueteros de más consideración; luego seguían las mozas que entrarían en danza y la turbamulta de mirones y de asistentes.

Cantaba o recitaba mil antiguas leyendas en verso de las edades divinas, de héroes y semidioses: de la venida de Europa a su isla, del furor amoroso de Pasifae y del triunfo y de la perfidia de Teseo. Y bailaba aún, según ella aseguraba, la misma ingeniosa danza que Dédalo compuso para la princesa Ariadna de las trenzas de oro.

Cuando la policía visitaba los bailes indígenas, ocultaban ellos sus armas metiéndoselas en la faja, á lo largo del calzoncillo, lo que les obligaba á continuar la danza con una pierna rígida, lo mismo que si estuviesen paralíticos.

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando