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El argumento del apóstol traidor ante el vaso de nardo derramado inútilmente sobre la cabeza del Maestro, es, todavía, una de las fórmulas del sentido común. La superfluidad del arte no vale para la masa anónima los trescientos denarios. Si acaso la respeta, es como a un culto esotérico.

5 Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él grande multitud, dice a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos? 6 Mas esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer. 7 Le respondió Felipe: Doscientos denarios de pan no les bastarán, para que cada uno de ellos tome un poco. 8 Le dice uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro:

18 Y muchos de los que habían creído, venían, confesando y dando cuenta de sus hechos. 19 Asimismo muchos de los que habían practicado vanas artes, trajeron los libros, y los quemaron delante de todos; y echada la cuenta del precio de ellos, hallaron ser cincuenta mil denarios. 20 Así crecía poderosamente la palabra del Señor, y prevalecía.

Mandantes per præsentem cartam nostram Bajulo Cæseraugustoe qui pro tempore fuerit, quod statim post obitum dicti Dominici Johannis, det et solvat præfatis fratibus, quandiu eis fuerit vita comes, et alteri superviventi post mortem alterius, duodecim denarios qualibet die, et annis singulis septuaginta solidos jaccenses super redditibus almutini salis Cæsaraugustæ.

35 Y otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al huésped, y le dijo: Cúralo; y todo lo que gastares de más, cuando yo vuelva te lo pagaré. 36 ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo de aquel que cayó entre ladrones? 37 Y él dijo: El que usó con él de misericordia. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz lo mismo.

37 Y he aquí una mujer que había sido pecadora en la ciudad, cuando entendió que estaba a la mesa en casa de aquel fariseo, trajo un alabastro de ungüento, 40 Entonces respondiendo Jesús, le dijo: Simón, una cosa tengo que decirte. Y él dice: Di, Maestro. 41 Un acreedor tenía dos deudores: el uno le debía quinientos denarios, y el otro cincuenta; Di, pues, ¿cuál de éstos le amará más?

5 Porque podía esto ser vendido por más de trescientos denarios, y darse a los pobres. Y murmuraban contra ella. 6 Mas Jesús dijo: Dejadla; ¿por qué la fatigáis? Buena obra me ha hecho; 8 Esta ha hecho lo que podía; porque se ha anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura.

3 Entonces María tomó una libra de ungüento de nardo líquido, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y limpió sus pies con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del ungüento. 5 ¿Por qué no se ha vendido este ungüento por trescientos denarios, y se dio a los pobres? 7 Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto;

Cum nos Jacobus Dei gratia Rex Aragonum &. Intendentes ordinare, quod ille qui amodo Aljafariam Cæsaraugustæ custodiret, esset presbiter, qui qualibet die celebraret missam et alia divina officia in capella, quæ est in palatio dictæ Aljafariæ, et reciperet qualibet die illos duodecim denarios, el illos septuaginta solidos jaccenses annuatim pro vestibus, quos recipit Dominicus Johannis qui nunc tenet dictam Aljafariam ex concessione Illustrissimorum Dominorum Jacobi avi nostri et Alfonsi fratris nostri recolendæ memoriæ Regum Aragonum, ad instantiam et supplicationem ipsius Dominici, sic duximus ordinandum; quod ipse Dominicus in vita sua recipiat et habeat dictos duodecim denarios qualibet die, et septuaginta solidos jaccenses annuatim, et post ejus obitum, Dominicus Johannis presbiter et Petrus Johannis filii, dicti Dominici ambo fratres, et alter qui supervixerit post mortem alterius, teneat et percipiat dictos duodecim denarios qualibet die, et septuaginta solidos jaccenses annuatim, prout pater eorum percipit et percipere consuevit, et quod teneantur custodire dictam Aljafariam dum vixerint, et quod incontinenti prænominatus Dominicus presbiter teneatur die qualibet, missam in dicta capella et alia divina officia celebrare; et pater ipsius teneatur dicto prebítero, quamdiu dictos duodecim denarios et septuaginta solidos jaccenses percipiet, providere.