Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 1 de mayo de 2025
¡Vos amáis! ¡amáis por la primera vez! dijo Quevedo con acento sonoro, seco, vibrante, solemne. ¡Oh! ¡sí! ¡yo creo que sí! ¡yo estoy loca! exclamó Dorotea. ¡Misterios del espíritu! murmuró Quevedo ; ¡no nos comprendemos! ¡la ciencia escrita! ¡mentira! ¡la ciencia permanece oculta! ¡yo adivino, yo presiento... porque veo... observo... y me asombro! ¿De qué os asombráis? De mí mismo.
Pero esperamos que llegaréis a amarnos como le amáis, y bien que yo no haya sido lo que un padre debiera ser para vos desde mucho tiempo, quiero hacer todo lo que pueda por vos hasta mi muerte, y dotaros como a mi hija única. Tendréis en mi mujer la mejor de las madres; es ésa una felicidad que no habéis conocido desde que estáis en edad de poder apreciarla.
Vos tenéis el corazón hecho pedazos, yo también; vos amáis, yo también amo; pero amo con más heroísmo que vos, y lo sacrifico todo á mi amor... todo... hasta los celos. Venís muy donosamente loco, tío; yo creí que os habríais dejado á la puerta de mi celda vuestros cascabeles de bufón. En efecto, ni aun en los bolsillos los traigo.
Me gusta más el coselete que la sotana, y luego el amor... ¡poder amar sin ofender á Dios ni al mundo! No sabéis hablar más que de amor. Pues mirad; hasta ahora no he amado. ¿Amáis á la dama del juramento? Os juro, señora... Si yo fuese la dama de la galería... ¡Ah! Si yo fuese la que de tan mal talante os echó por una escalera excusada... ¿Vos me libertáis de mi promesa?
Palabra del Dia
Otros Mirando