Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 30 de junio de 2025


Buscó en voluminosos diccionarios las palabras más raras y altisonantes, sudó tinta por todos sus poros, y al cabo de diez días de rudo trabajo puso punto final a su obra, titulándola «La princesa BelisaCon el precioso manuscrito en el bolsillo, salió a consultar a su amigo Juan del Laurel.

No falta un estudiante que en la taberna de su pueblo haga discursos pomposos y altisonantes, remedando los que en Madrid había oído. Ni se echa de menos tampoco un pardillo montañés, albitrante y con otras industrias saludables, el cual pesca a río revuelto, y en días de revolución echa al fuego, a impulsos del patriótico entusiasmo, los papeles del Ayuntamiento donde constaban sus trapisondas.

Un sencillo labrador, un modesto artesano, que conocen bien los objetos de su profesion, piensan y hablan mejor sobre ellos que un presuntuoso filósofo que en encumbrados conceptos y altisonantes palabras quiere darles lecciones sobre lo que no entiende. Diferentes modos de conocer la verdad.

Si nombráis a Dios, llamadle por su nombre, y no con los que están hoy de moda, Ser Supremo, Suprema Inteligencia, Moderador del Universo y otros de este jaez. ¡Cómo, señora tía! exclamó Rafael , ¿negáis a Dios sus poderes y sus prerrogativas? No por cierto respondió la marquesa ; pero en el nombre Dios se encierra todo. Buscar otros más altisonantes es lo mismo que platear el oro.

El lenguaje de los diversos personajes no es jamás distinto; los de la clase más abyecta recitan estrofas tan altisonantes como los reyes y dioses.

Al principio, el capitán pareció burlarse, con una gracia parisién, de los términos solemnes y altisonantes con que don Marcos trataba las cuestiones de honor. Pero su grave y tenaz prosopopeya acabó por vencer á este fisgón, que se puso á su mismo tono, interesándose en el asunto y reconociendo su importancia.

Léanse con reflexion los escritos á que aludimos, despójeselos de algunas palabras altisonantes y enigmáticas, y no se encontrará en ellos nada que no dijeran á su modo Lucrecio y Voltaire. Y bien ¿á qué se reduce esa espontaneidad, esa inspiracion de que tanto se nos habla? Fijemos las ideas, consignando y clasificando los hechos.

Palabra del Dia

accidents

Otros Mirando