Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 30 de junio de 2025
Los trabajos de don Luis en juntas y comisiones del partido; los artículos, proyectos y dictámenes que escribió, serían incalculables, e infinitas las veces que proyectó terciar en los debates; pero jamás tuvo ánimo para romper a hablar en público ni para enviar dos cuartillas a un periódico.
El extravío de unas cuantas cuartillas, dejó incompleto el presente artículo, en la sucinta descripción que dejamos hecha de la Procesión del Corpus en el siglo XV. Halladas luego, estimamos que por su interés deben ser publicadas, aun fuera de su lugar, y así lo hacemos, seguros de que su contenido será visto con agrado por los curiosos que deseen conocer la historia de los gremios sevillanos, casi desconocida al presente.
Hace un momento, después de dos largas horas de trabajo a la sombra del único árbol del jardín, entre las matas de rosales, y a pesar del vientecillo que levantaba las hojas de mi libro, mi padre se ha recostado en su butaca, después de sujetar cuidadosamente las cuartillas cubiertas de su fina letra, y me ha mirado con sonrisa de aprobación.
Pero no me es dado proseguir, ni tampoco me queda tiempo de bosquejar, como quisiera, otros monumentos de Toledo..... Esta rapidísima reseña ha de publicarse dentro de dos horas, y los cajistas me van quitando de las manos las cuartillas según que las escribo de primera intención.
Es casi imposible poner en las cuartillas uno de estos interiores de pueblo en que la tristeza se va condensando poco a poco y llega a determinar una modalidad enfermiza, malsana, abrumadora.
Vamos a ver dijo don Luis entrando ante todo, agradezco muy de veras su atención; pero dudo que hayamos encontrado algo nuevo. ¡He estudiado tanto el asunto! Aquí tiene Vd. contestó Pepe entregándole las cuartillas. Siéntese Vd. un momento. El senador comenzó a leer para sí, y su fisonomía fue tomando una expresión indefinible: pugnaba por disimular la emoción y no podía.
No tenía la menor intención de dar mis cuartillas a la imprenta; pero, cuando salió El Correo de Lúzaro, todos los amigos me instaron para que publicase mis memorias en el periódico. Debía colaborar en la cultura de la ciudad. Yo era uno de los puntales de la civilización luzarense.
En Cotta he pasado días cuyo recuerdo será tan imperecedero en mi memoria, como lo es en mi alma el cariño que profeso á los que me acompañaron en aquellos. Mis amigos, mejor dicho, mis hermanos Tamayo y Belloc me han visto escribir en aquellas alegres soledades muchas cuartillas de este libro.
Concluída la elección, nuevamente sonó la música, desaparecieron de la mesa tinteros y cuartillas, sustituyéndose con finos manteles de piña, que bien pronto se cubrieron de manjares. Se almorzó y acto continuo se retiró á descansar el Alcalde, habiendo antes prevenido, que las quintas las haría á las cinco de la tarde.
En cuanto se le fue el enojo, Miguel se rió de la gansada de su amigo y no volvió a pensar más en ella. No obstante, se la hizo pagar con algunas bromas; era la menor venganza que podía tomar. Te participo, amado Mánchester, que si no me das un fósforo, divulgo el secreto que hace años te tengo guardado decía sin levantar la cabeza de las cuartillas que estaba escribiendo.
Palabra del Dia
Otros Mirando