Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 20 de mayo de 2025
Y decidme: ¿habéis venido también á que yo siga salvando á don Juan? Sí. ¿Y de qué modo puede ser eso? Impidiendo que me prendan. Porque preso yo, don Juan queda sin consejo, sin ayuda. No os prenderán ó he de poder poco. Se necesita además... ¡Qué!... Que engañéis á vuestro... ¿qué sé yo lo que es vuestro el tío Manolillo? ¡Ah! ¡infeliz!
Si yo no encuentro á la puerta misma de la casa donde Dorotea con vos estaba al tío Manolillo que con doña Clara venía, vuestra esposa, vuestra noble y digna esposa, os hubiera visto en los brazos de esa mujer, y esa mujer se hubiera matado segura de que os dejaba á entrambos muertos. ¡Oh! ¡ved no os engañéis, don Francisco!
Se dirigían por el interior de las habitaciones á la cámara pública de audiencia. La duquesa iba de prisa. Al pasar por una galería obscura, la duquesa, que iba muy delante del conde de Olivares y de doña Clara, dijo con acento cortado: Por piedad, caballero, no me engañéis; ¿por qué habéis querido que vuestra esposa se ponga esas joyas hoy?
Eso quería yo hacer, y vos no quisísteis. Temí por vos. Y hoy por vos tenéis miedo. Os ruego que lo penséis. Lo tengo pensado. ¿Conque soy vuestro prisionero? Prisionero por amor. Sois, pues, mi Carlos V. Y vos, mi Francisco I; por lo mismo temo firmar con vos las paces, no sea que vos me engañéis, como Francisco I engañó á Carlos V. ¡Entendida sois en historia!
Trata de dominar tu espanto. ¡Por amor de Dios, no me engañéis, Marta! ¿Cuándo os he engañado? ¡Jamás!... ¡Jamás!... perdonadme esta duda. No sé lo que me pasa, tengo el corazón oprimido, apenas puedo respirar, tiemblo de pies a cabeza; una voz secreta me dice que voy a perderos para siempre. ¡Antes preferiría morir, Marta, a no volveros a ver más!
Palabra del Dia
Otros Mirando