Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 10 de junio de 2025
Eran señoras que no habían querido vestirse para la fiesta; doncellas de servicio de las pasajeras ricas, simples criadas de a bordo que aprovechaban la ausencia del mayordomo para echar un vistazo. Ojeda vio despegarse de este grupo y atravesar el jardín de invierno, saliendo a la cubierta, una mujer vestida de obscuro, sencillamente. «¡Ah, señora Eichelberger!...»
Mina Eichelberger, la mujer del director de orquesta, murmuraba estas palabras con el mentón apoyado en el pecho y la mirada fija en Fernando, de pie junto a ella. Hablaban en la cubierta de los botes, bajo la sombra movediza de un toldo de lona que dejaba avanzar una faja de sol o la repelía, siguiendo el balanceo del buque, largo, suave, apenas perceptible.
¡Su brillante entrada en la vida, mucho antes de conocer al maestro Eichelberger, cuando la aplaudían en los teatros de Alemania y aprendiendo luego el italiano interpretaba las obras de Wagner en las escenas de Europa y América!... Diez y nueve años; su voz no era portentosa: justa y precisa nada más; la necesaria para cantar su parte sin ahogos.
Palabra del Dia
Otros Mirando