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Actualizado: 11 de mayo de 2025
En el inmenso valle, los naranjales como un oleaje aterciopelado; las cercas y vallados de vegetación menos obscura, cortando la tierra carmesí en geométricas formas; los grupos de palmeras agitando sus surtidores de plumas, como chorros de hojas que quisieran tocar el cielo cayendo después con lánguido desmayo; villas azules y de color de rosa, entre macizos de jardinería; blancas alquerías casi ocultas tras el verde bullón de un bosquecillo; las altas chimeneas de las máquinas de riego, amarillentas como cirios con la punta chamuscada; Alcira, con sus casas apiñadas en la isla y desbordándose en la orilla opuesta, toda ella de un color mate de hueso, acribillada de ventanitas, como roída por una viruela de negros agujeros.
La fiebre levantina enloquecía a los nietos de los rífenos, y eran muchos los que, con la blusa chamuscada, sacudiéndose la lluvia de pavesas, corrían siguiendo la marcha del fuego, deteniéndose para silbar al pirotécnico cuando la traca se cortaba, apagándose por algunos segundos.
Contrariado y triste se mostraba Damián de Goes, que era muy humano y benigno, de la feroz conducta que había tenido la plebe lisbonense con Judas Abravanel. Esto retrajo a su memoria la horrible matanza de judíos que pocos años antes, siendo él todavía muchacho, había hecho la plebe de Lisboa, fanatizada y enfurecida por algunos frailes y secundada por marineros de diversos países de cuantos barcos estaban anclados en el Tajo. Tres días duraron el saqueo y la matanza. Más de quinientos judíos murieron quemados, y degollados cerca de dos mil. El hedor de la carne chamuscada, de los cadáveres insepultos y de la sangre corrompida infectaba el aire. El Rey Don Manuel el Dichoso se hallaba entonces en
Volvieron a surgir los chorros de humo sobre la carne chamuscada, sonaron los tiros, y el toro corrió otra vez, pugnando por aproximar la boca al pescuezo enroscando su cuerpo macizo; pero ahora los movimientos eran de menos violencia, como si su vigorosa animalidad comenzara a habituarse al martirio.
Palabra del Dia
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