Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 6 de octubre de 2025
Señó abate gritó una voz, mientras una mano pesaba con formidable empuje sobre los hombros del preceptor ; siéntese y calle. Caballero dijo otro ¿se podría saber quién es usted? Soy D. Francisco Xavier de Jindama repuso con timidez y urbanidad el viejo. Lo digo porque en cuanto le vi a usted y le oí, diome olor a lechucería.
Cada palabra que sus discípulos pronunciaban mal y no decían bien una sola le hacía dar bufidos y levantar las manos con indignación hasta tocar el ahumado techo de su vivienda. Estaba orgulloso de la urbanidad con que trataba á sus discípulos.
Le recordé que había intentado en vano encontrarla en su casa y que la había escrito para participarle el casamiento. Sí, la estricta urbanidad y nada más. Pero yo hubiera querido otra cosa... ¿Qué, señora? Un poco más de interés en hablarme de sus proyectos... antes de que fuesen definitivos... Le hubiera a usted dicho, acaso, cosas... interesantes. Siempre es tiempo de decirlas.
¡Julio! me dijo con la más perfecta y aristocrática urbanidad: ¡Fernanda! Y dándose vuelta y señalando a la más joven, repitió, como toda presentación: ¡Blanca! Me incliné reverenciosamente y al levantar los ojos, vi la imagen doble de mi compañera de teatro ¡dieciocho años ha!... Me parece que nosotros somos viejos amigos me dijo Fernanda.
Se las educaba en la inmodestia, de donde resultaba que estas tales niñas apenas podían esconder, bajo el barniz de la urbanidad, el desprecio que sentían hacia todo lo que fuera o pareciese inferior a la esfera en que ellas estaban.
Palabra del Dia
Otros Mirando