United States or Djibouti ? Vote for the TOP Country of the Week !


El corazón humano adolece con frecuencia de estos achaques, no por maldad propiamente, sino por falta de educación de los sentimientos, por desuso de los más delicados de ellos, por resabios del egoísmo adquiridos en la libertad de una vida sin trabas ni linderos.

Como otros hombres se enorgullecen por descender de Guzmanes, Laras y Toledos, él se precia de contar entre sus abuelos al célebre Mañara, y si no dice lo mismo de Tenorio, es por no estar demostrado que en realidad haya existido: en cambio alardea de que, a no impedírselo las parejas de agentes de orden público, los serenos, el alumbrado por gas y otras trabas, hubiera sido cien veces más terrible que aquellos dos famosos libertinos.

En suma: las Filipinas continuarán siendo españolas, si entran en la vía de la vida legal y civilizada, si se respetan los derechos de sus habitantes, si se les conceden los otros que se les deben, si la política liberal de los Gobiernos se lleva á cabo sin trabas ni mezquindades, sin subterfugios ni falsas interpretaciones.

La mano de la Judic es la más bonita de París. En las carreras es donde se lucen los mejores vestidos. ¡Qué linda estaría Adela, en el pescante de un coche de carreras, con un vestido de tila muy suave, adornado con pasamanería de plata! ¡Ah, y con un guía como Pedro, que conocía tan bien la ciudad, qué pronto no se estaría al corriente de todo! ¡Allí no se vive con estas trabas de aquí, donde todo es malo!

Si en épocas más adelantadas aparecen la épica, la lírica y la dramática como especies poéticas distintas, no acontece así en su principio, porque entonces aún no existe esa separación; si el drama ya perfecto contiene en la antítesis de la epopeya y la lírica, como momentos de su existencia, cuya síntesis es más tarde, lo observamos en sus orígenes confundido en parte con estos elementos, en parte luchando con ellos y esforzándose en desembarazarse de las trabas que le oponen.

Dijo el Señor: «Creced y multiplicáos»; y sucede que nadie censura a la mujer ni al hombre porque se desarrollen ni crezcan; mas ¡oh terrible inconsecuencia! en cuanto dos que bien se quieren tratan de multiplicarse o se colocan en disposición de que la operación sea posible, todo es ponerles trabas, prohibiciones y obstáculos para que no cumplan la segunda mitad del divino mandato.